15 de octubre 2024
Daniel Ortega evitó hablar sobre la muerte de su hermano menor Humberto Ortega Saavedra —quien falleció el pasado 30 de septiembre de 2024, como preso político de su dictadura— durante el 45 aniversario de la fundación de la Policía Nacional, realizado la noche de este lunes 14 de octubre.
Esta es la primera vez que el mandatario reaparece desde que se informó el fallecimiento de su hermano, quien fue jefe del Ejército, a quien mantuvo bajo “casa por cárcel” desde el 28 de mayo hasta su fallecimiento, y a quién señaló de “traidor a la patria”.
Durante el discurso que duró 45 minutos, el dictador no mencionó ni una sola vez a su hermano, quien murió a causa de un paro cardiorrespiratorio. Humbero Ortega envió un último mensaje de voz a CONFIDENCIAL en el cual se nombraba como “preso político” y alertaba que su situación de aislamiento en cualquier momento podría “producir un desenlace fatal”.
Ortega tampoco se refirió al destierro y desnacionalización de los 135 presos políticos que fueron enviados a Guatemala a comienzos de septiembre, sobre los que ocultó la lista de los connacionales expulsados del suelo nicaragüense.
El mandatario omitió hablar directamente sobre la orden que dio el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, a préstamos que Nicaragua solicite ante organismos multilaterales, como el Fondo Monetario Internacional (FMI), como una medida ante el poco esfuerzo que el régimen está haciendo para combatir el tráfico de personas. Sin embargo, sí admitió el golpe que han tenido las sanciones.
“Los imperialistas claro que han afectado con lo que ellos llaman sanciones, pero logramos contar con la cooperación, la solidaridad incondicional de pueblos hermanos, gobiernos como la República Popular China, la Federación Rusa, la República Bolivariana, Cuba,siempre cooperando a pesar de las dificultades, y eso nos permite tener paz y estabilidad”, dijo el mandatario.
Primer ministro israelí “es hijo del demonio”
Ortega aprovechó su alocución para tildar de “hijo del demonio” al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu. Los insultos ocurren tres días después que Ortega rompiera las relaciones diplomáticas con Israel en apoyo a Palestina.
“El primer ministro es hijo del demonio porque lleva en la práctica una política de terror, y es Hitler. Allí instalado, llamando a destruir a los pueblos al igual que el que preside Ucrania, que es otro nazi queriendo comprometer a la OTAN para irse a la guerrra contra la Federación Rusa”, dijo.
Ortega afirmó —sin pruebas— que “han instalado armamento atómico en puntos de alta sensibilidad provocando a Rusia”, y aunque no han caído en la provocación “tampoco se van a dejar golpear y permitir una humillación como la que andan promoviendo los mandatarios de la OTAN”.
En su remembranza histórica en la que señala a Estados Unidos de ser enemigo y financiador de la dictadura somocista, Daniel Ortega ahora acusó a Israel de enviar armamento a Somoza.
“Los fascistas que gobernaban Israel (enviaban) aquí desde aviones para que bombardearan al pueblo, hasta lanchas y fusiles también, armamento de todo tipo, inteligencia, seguridad, asesoramiento. Israel estuvo presente al lado de la tiranía como instrumento del imperio yanqui”, sostuvo.
En su discurso, informó que en Nicaragua hay oficiales rusos que están brindando “capacitación” contra el narcotráfico, el crimen organizado y defensa de la seguridad.
“Son servicios que ellos le están brindado a toda Centroamérica y vienen de Centroamérica a hacer los cursos (a Nicaragua), le reconocemos ese esfuerzo”, afirmó sin dar más detalles.
Un informe del Instituto Jack D. Gordon de Políticas Públicas de la Universidad Internacional de Florida (FIU), elaborado por el investigador Douglas Farah, señaló que “Nicaragua es el centro más visible de la vigilancia rusa (en Latinoamérica), bajo el apoyo incondicional del régimen de (Daniel) Ortega a (Vladímir) Putin”.
Díaz: “No pudieron ni podrán”
En su discurso, el jefe de la Policía Nacional, primer comisionado Francisco Díaz, afirmó que “con la paz no se juega” y señaló a Estados Unidos y a sectores de la Iglesia católica, empresarios y oenegés del supuesto intento de “golpe de Estado” de 2018.
“No pudieron ni podrán. Con la paz no se juega. La principal misión del Ministerio del Interior, la Policía Nacional y el Ejército de Nicaragua es defender la soberanía, preservar la paz y la seguridad”, advirtió.
La titular del Ministerio del Interior, María Amelia Coronel Kinloch, también aprovechó su discurso para enviar una advertencia: “no dejaremos que esos malos hijos de la patria nos arrebaten la paz y mucho menos la seguridad”.
“Estamos cumpliendo con sus órdenes (las de Ortega) de volver a nuestro orígenes, defensa de la constitucionalidad e institucionalidad de la revolución”, reiteró.
En el acto de la Policía fueron ascendidos a comisionados generales, los comisionados mayores, Luis Octavio Saavedra Mercado, quien es subdirector del Hospital “Carlos Roberto Huembes”, y Abel Antonio Herrera Castillo, quien el pasado 6 de septiembre fue nombrado segundo jefe de la Dirección Antinarcóticos.
Daniel Ortega admitió que los nuevos comisionados generales no tendrán nuevos cargos pues fueron ascendidos por el tiempo que llevan en servicio. “Es imposible que todos tengan cargos”, aseveró.