2 de diciembre 2016
El Gobierno Territorial Rama y Kriol (GTR-K) emitió un pronunciamiento a las instituciones del Estado sobre el impacto que el huracán Otto causó en el territorio indígena (Reserva Indio Maíz), el pasado 24 de noviembre, en el que explica que no es necesario extraer la madera caída para prevenir incendios, pues muchos de los árboles continúan vivos y se regenerarán naturalmente con el tiempo. El documento fue presentado ante las autoridades de Marena, el Consejo de Desarrollo de la Costa Caribe y la Procuraduría General de la República.
Tomando como ejemplo los huracanes Juana y Félix, el GTR-K, destaca que el aprovechamiento forestal, fomentó en esa época la colonización ilegal de los territorios indígenas y las áreas protegidas. “Las empresas madereras avanzaron hacia áreas no afectadas y aprovecharon de los permisos aprobados por las autoridades para la extracción de madera caída, para extraer madera en pie”, reza el pronunciamiento.
El mal precedente de otras épocas, obliga a los líderes indígenas a no permitir la entrada de empresas madereras o personas naturales para extraer la madera de la zona compartida entre el territorio Rama y Kriol y la Reserva Biológica Indio Maíz, aún con permisos de aprovechamiento forestal.
“De acuerdo a nuestro plan autónomo de desarrollo y administración, la Reserva Biológica Indio Maíz tiene un alto potencial turístico, que debemos desarrollar para el bienestar de nuestras comunidades. Además de la prohibición de empresas madereras en nuestro territorio, se requiere que los comunitarios Rama, Kriol y viejos vivientes aprovechen de la madera caída a una distancia prudente de ríos y senderos que permita mantener el paisaje natural para fines turísticos”, dice el comunicado, que agrega que no permitirán proyectos de reforestación en zonas de bosque primario afectado por el huracán, pues estos sitios tienen la capacidad de regenerarse por sí mismo.
Como una medida de protección de la reserva Indio Maíz, el GTR-K solicita al Ejército crear puestos a lo largo de la frontera agrícola del lado oeste de la reserva, para prevenir la entrada de colonos y madereros. “La mejor manera de reconstruir la reserva biológica que protege al país contra futuros huracanes, es prevenir la colonización de Indio Maíz y reubicar a aquellos que se encuentran ilegalmente dentro de la reserva”.
Los líderes indígenas piden a las autoridades de gobierno, que antes de tomar cualquier decisión que afecte a la zona compartida entre la Reserva Biológica Indio Maíz y el Territorio Rama y Kriol, deben consensuarlo con las comunidades indígenas.