13 de enero 2022
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, sostuvo un encuentro en Managua con el vicepresidente de Asuntos Económicos de Irán, Mohsen Rezai, quien dio su apoyo para “vencer al imperialismo norteamericano”; en medio de la controversia con Argentina, que condenó su presencia en la quinta toma de posesión y cuarta consecutiva del exguerrillero sandinista como gobernante.
Rezai es uno de los imputados por la Justicia argentina por un atentado terrorista del 18 de julio de 1994, contra la mutual judía Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) de Buenos Aires, que dejó 85 muertos y sigue impune.
El Ejecutivo informó en medios del Gobierno que Ortega y su esposa, “la compañera Rosario Murillo, vicepresidenta de Nicaragua, sostuvieron un encuentro con la delegación de la República Islámica Irán, que asistió el pasado 10 de enero a la juramentación del pueblo presidente”.
“Estamos juntos en este camino. Tenemos toda la disposición de colaborar y cooperar para que podamos vencer al imperialismo norteamericano, y ese es nuestro deber como hermanos, nuestra obligación como hermanos, venir y cooperar juntos, nosotros lo consideramos nuestra obligación estar aquí con ustedes”, dijo Rezai, quien encabezó la delegación iraní.
Las autoridades nicaragüenses no informaron la fecha de la reunión, ni los temas abordados, sin embargo en la víspera, la también primera dama afirmó que Nicaragua e Irán estaban discutiendo un acuerdo de cooperación.
Por su parte, Rezai atribuyó el encuentro a razones políticas. “Cuando nos dimos cuenta de que Estados Unidos ha empezado una amenaza contra ustedes, sentimos una obligación nuestra de venir aquí y declarar que Irán está con Nicaragua y que Irán está junto a Nicaragua. Los buenos amigos tienen que acompañarse unos a otros en condiciones como esta”, remarcó el funcionario de Irán.
El martes pasado, la Cancillería argentina emitió un comunicado en el que “la República Argentina expresa su más enérgica condena a la presencia de Mohsen Rezai en el acto de toma de posesión del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega”.
Según la nota de Exteriores, su presencia en Managua constituye para el Gobierno de Alberto Fernández “una afrenta a la Justicia argentina y a las víctimas del brutal atentado terrorista”.
Señalan a Interpol
Este jueves, el Gobierno argentino cuestionó que Interpol no lo detuviera en Nicaragua, pese a que sobre él pesa una alerta roja de detención.
“Habría que preguntarle a Interpol por qué no sabía que iba a estar ahí o por qué no llevó adelante la detención que tenía que llevar adelante”, dijo este jueves la portavoz de la presidencia, Gabriela Cerruti, en una rueda de prensa.
“Correspondía más a Interpol que a los servicios de inteligencia de Argentina resolver esa situación”, comentó la portavoz.
Argentina ya había repudiado, en agosto pasado, la designación de Rezai en un cargo del Ejecutivo iraní, lo que calificó de “afrenta” contra la justicia y las víctimas “del brutal atentado terrorista” contra la AMIA.
Tanto dirigentes políticos como la comunidad judía en Argentina han levantado la voz por el accionar del embajador argentino en Nicaragua, Daniel Capitanich, y del Gobierno argentino respecto de la presencia de Rezai el lunes pasado durante la asunción de Ortega.
Según dijo Cerruti este jueves, Capitanich “no conocía la cara” de Rezai, “no estuvo en la misma habitación” y “no sabía que había sido invitado”, sino que “se enteró al día siguiente” por la prensa.
Delegación iraní
En su reunión con Ortega, Rezai se hizo acompañar de una delegación de al menos seis funcionarios iraníes, de acuerdo con la información oficial.
Entre sus acompañantes estuvieron el asesor del canciller y director general para América de la Cancillería de Irán, Reza Nazar Aharí; el alto asesor del vicepresidente de Asuntos Económicos, Mohammad Bagher Khodadadí; además del jefe de Protocolo y Programa del Viaje de la Presidencia de la República, Mohammad Said Najafí.
Además lo acompañaron el encargado de asuntos Protocolarios Aeroportuarios y del Vuelo, Amin Sharí; el embajador de Irán en Nicaragua, Majid Salehi; y el ministro consejero de la sede diplomática, Parviz Mansouri Asl, indicó el Ejecutivo.