1 de abril 2023
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Durante la Cumbre de la Democracia que tuvo como sede Costa Rica, la embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas, Linda Thomas-Greenfield, se reunió con funcionarios del Gobierno costarricense, entre ellos el presidente Rodrigo Chaves, y con nicaragüenses que se han exiliado en el vecino país por la represión del régimen de Ortega- Murillo.
El jueves, tras un almuerzo de trabajo en Casa Presidencial con el presidente Chaves, la embajadora, a través de una conferencia de prensa, agradeció a Costa Rica la condena al régimen de Nicaragua que despojó de su nacionalidad a 317 ciudadanos, así como por apoyar a los migrantes y refugiados..
También denunció la represión que se vive en Nicaragua. “El régimen tiene como objetivo a cualquiera que considere una amenaza y ha utilizado leyes represivas para despojar a miles de ONG de la situación legal que intentan ayudar a las comunidades locales”, dijo Linda Thomas-Greenfield haciendo énfasis al cierre forzoso de las más de 3300 organizaciones sin fines de lucro desde 2018
“El resultado ha sido una pérdida total de esperanza. Refugiados, migrantes vulnerables, solicitantes de asilo huyen de sus hogares en busca de una vida mejor, en algún lugar donde el Gobierno apoye a la gente”, reforzó.
El mandatario de Costa Rica, al ser consultado por la situación de los migrantes, indicó que ha obtenido recursos, una donación de un fondo especial del Banco Mundial con contribución de EE. UU., de 20 millones de dólares para el tema de la migración, aunque insiste en el problema de los migrantes económicos.
“Hemos discutido hasta en la OIM (La Organización Internacional para las Migraciones), para ver si hacemos que el alto comisionado de los Refugiados de la Naciones Unidas (ACNUR ), y la OIM le pongan más atención a los problemas de los que vivimos aquí en este hemisferio. No es justo que un pueblo pequeño tenga que, en situaciones fiscales difíciles, echarse al hombro toda la carga de lo que en realidad es una responsabilidad internacional”, recalcó Chaves
Este viernes la embajadora de Estados Unidos ante la ONU sostuvo un encuentro con exiliados y refugiados nicaragüenses para conocer, de primera mano, sobre el estado policial que viven los nicaragüenses bajo la dictadura de Daniel Ortega y el despojo de la nacionalidad de 317 ciudadanos, la persecución contra la Iglesia católica, el encarcelamiento de monseñor Rolando Álvarez, y la prohibición de las procesiones religiosas comentó el director de CONFIDENCIAL, Carlos Fernando Chamorro, quien participó en el encuentro.
"Le expuse ampliamente sobre la persecución contra los medios de comunicación y periodistas, la confiscación de Confidencial, 100% Noticias y La Prensa, el cierre de más de 50 medios de comunicación, y el exilio en que nos encontramos más de 120 periodistas, en Costa Rica, Estados Unidos y España. A pesar de la censura y la criminalización de nuestras fuentes, los periodistas independientes seguimos informando, investigando la corrupción y las violaciones a los derechos humanos y derrotando la mentira oficial”, señaló Chamorro.
Una de las nicaragüenses que participó en el encuentro afirmó que la embajadora Thomas-Greenfield destacó los logros obtenidos en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, donde el Informe del Grupo de Expertos documentó los crímenes de lesa humanidad en Nicaragua, para demandar justicia. También indicó que Estados Unidos está trabajando con otros países en la ONU en el plano político y diplomático.
"Los nicaragüenses no están solos en esta lucha por recuperar la libertad y la democracia en su país", dijo la embajadora de Estados Unidos ante la ONU a los refugiados nicas.
