Logo de Confidencial Digital

PUBLICIDAD 1M

PUBLICIDAD 4D

PUBLICIDAD 5D

Médico ecuatoriano de origen nica desde Guayaquil: "No se debe subestimar el virus"

El Dr. Eduardo Herdocia, analiza las lecciones para Nicaragua, del colapso de Guayas ante la pandemia covid-19

El médico ecuatoriano-nicaragüense, Eduardo Herdocia (de verde) vive en Guayaquil, una de las ciudades más afectadas por el covid-19. Foto: Cortesía

Redacción Confidencial

30 de abril 2020

AA
Share

La fulminante propagación del coronavirus en Guayaquil, Ecuador, una de las ciudades del mundo más castigadas por el coronavirus, creó una situación de abandono de cadáveres que la convirtió en noticia mundial, a principios de abril. El médico ecuatoriano-nicaragüense, Eduardo Hedocia, quien ha vivido de primera mano el colapso del sistema de salud del país andino, explica que una de las principales razones para el impacto de la pandemia fue que no se tomaron las medidas gubernamentales con prontitud.

"Creo que es una enfermedad o una situación que realmente ha superado las expectativas de todo el mundo. Sin embargo, creo que Ecuador tuvo suficiente tiempo, viendo ejemplos como el de España e Italia, que fueron bastantes semanas antes. Nosotros pudimos haber tomado otro tipo de medidas gubernamentales, para poder evitar así una rápida propagación", expresó en entrevista con el periodista Carlos F. Chamorro, en el programa Esta Noche.


El médico Eduardo Herdocia comparte las lecciones de Ecuador para Nicaragua, donde la pandemia alcanzaría su curva en un par de semanas, según la proyección de especialistas, mientras el Gobierno continúa sin adoptar medidas ni informa con transparencia sobre los casos y pruebas realizadas.

Hasta el momento, en Ecuador se han realizado casi 65 000 muestras para coronavirus SARS-CoV-2 entre PCR y pruebas rápidas, de las cuales se han descartado alrededor de 27 000 casos. Sin embargo, las autoridades afirman que hay 1357 fallecidos probables por covid-19.

Eduardo Herdocia explica que el 69% de los casos se han registrado en Guayaquil e insiste que la prevención es clave para combatir el virus.

Eduardo Herdocia es un médico, de padre nicaragüense, que participa en brigadas voluntarias en Ecuador. Foto: Cortesía

Hay una controversia sobre el número de fallecidos y sobre la verdadera extensión de la epidemia, de hecho el propio Gobierno admite que en la zona de Guayas hubo en un mes en 6000 fallecidos, cuando normalmente se registraban 1000, pero estos no se les hizo la prueba del coronavirus. ¿Hay un subregistro sobre el desarrollo de la pandemia y sobre el número de muertos?

También lo dicen las fuentes oficiales. Existe una subestimación en cuanto a las cantidad de pacientes confirmados que nos plantea el oficialismo con un listado de 24 000 pacientes, que se da principalmente porque en la primera etapa del crecimiento de la pandemia en el país, y en la ciudad de Guayaquil principalmente, no se llevó a cabo la cantidad de pruebas, de test de covid confirmatorios suficientes para poder determinar y para poder generar medidas de aislamiento tempranas a pacientes con covid-19, por lo cual en Ecuador, y en Guayaquil, entramos rápidamente una fase cuatro epidemiológica, en la cual simplemente se pierde el rastro del contagio, la pandemia se vuelve comunitaria, y muy difícil poder determinar pacientes que hayan estado en riesgo, y así poder determinar cuáles pacientes o qué población debe de mantenerse en confinamiento.

¿Cuántos test se hacían al inicio de la crisis? ¿Cuántos se hacen hoy en Ecuador? ¿Y quién los realiza? ¿Los hace únicamente el Gobierno? ¿O también los laboratorios y clínicas privadas los pueden hacer?

En las primeras semanas lo realizaba únicamente un instituto filial al Ministerio de Salud Pública, es decir, lo manejaban únicamente el Gobierno. Luego, a medida que la pandemia fue tomando mayor fuerza en el país se habilitaron a laboratorios privados para que puedan realizar este tipo de exámenes, sin embargo, muchos de ellos se demoraban de una a dos semanas para poder emitir un resultado, y muchos de ellos fueron canalizados directamente hacia Quito. El día de hoy el oficialismo dice que está realizando sobre 2000 pruebas diarias a nivel nacional, sin embargo aún, según los registros o las estadísticas de la OMS, seguimos estando cortos.

Pero hay algo que destacar, y es que en este momento ya en el país hemos estado en una fase muy avanzada en cuanto la contaminación, y es más importante también determinar que el Sistema de Salud, tanto público como privado, es decir, las clínicas y hospitales, tanto del Ministerio, del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social y las privadas, llegaron a tener un abarrotamiento y un colapso absoluto de camas, tanto de emergencias, hospitalizaciones y de unidades de cuidados intensivos, lo cual también disparó rápidamente la tasa de mortalidad.

Sabemos que en Ecuador el Gobierno decretó un confinamiento el 16 de marzo, pero también hubo, antes de esa fecha, carnavales, partidos de fútbol, aglomeraciones masivas. ¿Estas medidas no se aplicaron o llegaron muy tarde?

Se permitieron partidos de fútbol en los cuales llegó una gran cantidad de aficionados,  y luego de ello vimos, 14 días después, un repunte en cuanto a las estadísticas de pacientes infectados, que generaron este colapso. Estamos en época de vacaciones de los colegios y escuelas en toda la región costa, por lo cual muchos, mucha población había acudido a los balnearios, y las restricciones fueron después. Si hubieran sido más radicales desde un inicio, muy probablemente, se hubiera podido contener este crecimiento de la pandemia de covid-19.

Vos conociste de primera mano la situación de algunos hospitales en que se produjeron muchos muertos. Contanos un poco sobre tu labor como médico. Y por otra parte ¿por qué se produce este colapso de un sistema de salud?

Creo que ningún sistema de salud a nivel internacional ha estado preparado para recibir a tal cantidad de pacientes. Sin embargo, se pudo haber tomado medidas previas, de forma preventiva, por ejemplo, la rápida habilitación de grandes centros, de estadios, de centros de convenciones, de centros de exposiciones, para poder asistir o para poder recibir a pacientes en estados leves o moderados, que al final, si hubiesen recibido una atención temprana no hubieran necesitado, no hubieran requerido de unas largas hospitalizaciones, o bien de unidades de cuidados intensivos; pacientes que requerían oxígeno,  lamentablemente no tenían acceso a sistemas de salud, a ninguno, ni público ni privado, y eso generalmente, eso fue lo que ocasionó este colapso.

He tenido la oportunidad de estar en varios hospitales, tanto de la red pública del país, como de, también de la red privada, y en todos, hace tres o cuatro semanas veíamos largas filas de pacientes esperando ser atendidos, y muchos de ellos, muchos de ellos, incluso no llegaron a recibir algún tipo de atención sino que lamentablemente fallecieron, incluso, me atrevo a decir, y lo he visto, en las puertas de los hospitales, entonces, y también en las casas.

Yo como médico, he recibido un sin número de llamadas y mensajes de WhatsApp, y videos, muchos pacientes o familiares de pacientes que envían mensajes o vídeos solicitando una atención, y más que una atención, una ayuda de socorro. También envían videos de pacientes, de familiares en un estado bastante crítico, y que nos dicen “doctor, por favor, he tenido ocho, seis, doce  horas buscando, tocando las puertas en todos los hospitales y no he tenido la oportunidad de recibir atención en ninguno”.

Esas imágenes dramáticas que hemos visto de Guayaquil, de familias esperando en las funerarias o en las puertas de los cementerios para poder enterrar a sus muertos,  indican una cantidad de fallecidos enorme cada día, que incluso rebasó la capacidad de los servicios funerarios, del Ministerio de Salud y de las autoridades municipales. ¿Cuál es la explicación?

En Guayaquil las estadísticas del 2018 y 2019, teníamos un aproximado de 1000 fallecidos en el mes, sin embargo, hace 15 días, durante 15 días se registró en Guayaquil más de 6500 fallecidos, eso da el motivo por el cual todos los sistemas funerarios a nivel local, provincial, y también a nivel del país, han colapsado, de forma más trágica en la ciudad de Guayaquil.

Una de las explicaciones principales es que no solamente hay que contabilizar a los pacientes que fallecen con diagnóstico de covid-19, también hay que contabilizar a los pacientes que no fueron diagnosticados con covid-19 y que lamentablemente fallecieron por una falta de atención médica;  y también las afecciones colaterales de un sistema de salud colapsado, es decir, abarrotado, y sin la posibilidad de poder atender emergencias que cotidianamente se dan.

Vos trabajás en un fideicomiso del sector privado para brindar servicios de salud ¿cómo ha funcionado el sistema de salud en general en Ecuador?

En este momento estoy trabajando también de forma voluntaria en un fideicomiso que nació de una iniciativa de empresarios privados, sí, liderado por el señor Guillermo Lazo Mendoza, quien ha servido, ha sido como un efecto de imán para atraer grandes inversionistas y empresarios que, al ver el colapso o la falta de recursos, tanto en el sector público como privado, se han unido para adquirir equipos e insumos médicos, como ventiladores mecánicos, bombas de infusión, monitores cardiacos, trajes de protección, para poder ser donados de forma libre, indistintamente, al sector público como al sector privado, siendo obviamente el más beneficiado al sector público.

Al día de hoy hemos entregado más de 320 ventiladores mecánicos a nivel nacional; monitores cardíacos, que sirven para pacientes que estén ingresados en unidades de cuidados intensivos, principalmente, aunque también pacientes hospitalizados que estén recibiendo medicación para el manejo de coronavirus, requieren de una monitorización cardíaca continua; así como también bombas de infusión y demás equipos e implementos médicos, que han servido para salvar vidas de ecuatorianos en los hospitales, y para poder proporcionar esta carencia de un sistema de salud pública que realmente estaba bastante enflaquecido, aunque el Gobierno anterior había apuntado otra realidad.

Foto: Cortesía

Mucha gente en Nicaragua conoció tu mensaje cuestionando el llamado que hizo el alcalde de León durante la Semana Santa, la ciudad en la que viven tus familiares, a celebrar la Semana Santa con fiestas de manera masiva. ¿Cómo valoras, por una parte, la acción del alcalde de León? ¿Y por la otra, la manera en cómo el Gobierno de Nicaragua ha estado enfrentando esta emergencia?

Yo soy mitad nicaragüense, y siempre lo he defendido, mi papá es nicaragüense y mi mamá es ecuatoriana, y amo mis dos patrias.  Y realmente fue como un mensaje de susto, fue un mensaje de alarma, que quise enviarlo primero al grupo de mi familia, al grupo de mis amigos nicaragüenses, y que tengo entendido que se pudo replicar en un sinnúmero de veces, y espero que haya podido tener algún tipo de repercusión positiva, y que se hayan podido evitar este tipo de manifestaciones. Quizás es por ignorancia, o quizás porque no ha llegado aún la crisis. Realmente me sentí bastante indignado, y más que nada, impotente al poder ver, ver ese mensaje de una invitación, que para mí, lo categoricé como un genocidio,  ara la Semana Santa, para que la gente vaya a las playas de Poneloya a festejar.

¿Qué le diría a tus colegas médicos en Nicaragua? ¿Qué podemos aprender de la tragedia del coronavirus en Guayaquil, en Guayas, y en tu país, Ecuador?

Primero, no lo subestimemos. Creo que Ecuador subestimó un poco, o las autoridades ecuatorianas y la población también subestimó mucho el tema del crecimiento y de la rápida virulencia que este virus ha tenido en el país; que se protejan; que sean realmente cautelosos al momento de atender un paciente, que atendamos a todos como que si todos, o nos comportemos como si todos los pacientes o todos los familiares o toda la población, tenga coronavirus. Y al Gobierno, simplemente decirle que sincere los datos. Creo que eso es la mayor, la mayor importancia de poder tener realmente datos verídicos, datos estadísticos que nos digan realmente el impacto de una pandemia como esta en un país, en este caso Nicaragua, por ciudades, por regiones, por departamentos, para así poder focalizar los recursos.

Lamentablemente creo que el sistema de salud de Nicaragua, es un sistema de salud frágil. Entonces, realmente tengo miedo y tengo preocupación por Nicaragua, por León, que es donde mayormente se concentra mi familia, a quienes aprovecho para mandarles un abrazo, a mi abuelita principalmente, a doña Edith de Herdocia, a quien realmente la amo, y que creo que fue por ella que me surgió ese sentimiento de realizar ese video, viendo como diputados jugaban con niños, tirando las pelotitas, pensando las medidas preventivas era un chiste o que simplemente debo decir “hay que lavarse las manos y hay que cubrirse la cara”, era suficiente para poder contener eso.

Y saber que mi abuela es una persona que está en una edad que es realmente riesgosa para ella, y saber que las medidas, o que el Gobierno no estaba tomando las cosas como debieron, o como se debería hacer, realmente me generó una preocupación inmensa que fue lo que me motivó a realizar ese video con una intención de decirle a los nicaragüenses, que un ecuatoriano-nicaragüense, que ha vivido la pandemia de Guayaquil, desde un epicentro realmente regional, que por favor se cuiden, que no lo tomen de broma, que realmente los médicos tienen que protegerse para poder atender a pacientes, y que la importancia de salvar vidas es fundamental.


Archivado como:

PUBLICIDAD 3M


Tu aporte nos permite informar desde el exilio.

La dictadura nos obligó a salir de Nicaragua y pretende censurarnos. Tu aporte económico garantiza nuestra cobertura en un sitio web abierto y gratuito, sin muros de pago.



Redacción Confidencial

Redacción Confidencial

Confidencial es un diario digital nicaragüense, de formato multimedia, fundado por Carlos F. Chamorro en junio de 1996. Inició como un semanario impreso y hoy es un medio de referencia regional con información, análisis, entrevistas, perfiles, reportajes e investigaciones sobre Nicaragua, informando desde el exilio por la persecución política de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.

PUBLICIDAD 3D