25 de agosto 2019

Dictadura que llamó “mafioso” al Papa atribuye a manipulaciones las relaciones “accidentadas”

PUBLICIDAD 4D
PUBLICIDAD 5D
El nuevo obispo de León y Chinandega abogó en su sermón por una “iglesia ortodoxa”, ante una rala presencia de feligreses de León y otros departamentos
Monseñor René Sándigo tomó posesión de las diócesis de León y Chinandega en un acto modesto y sin excesos. Foto: Carlos Herrera.
Monseñor René Sándigo se convirtió este sábado en el obispo 51 de las Diócesis de León y Chinandega. En el sermón de su rito de incorporación definió sus ideas como párroco: abogó por una “iglesia ortodoxa” y dijo que sus homilías no serían de tres minutos, y que tampoco le molestaba que los feligreses se quedaran dormidos.
El acto tuvo una rala afluencia de leoneses, pero sí una decena de buses de otros departamentos del país. Sándigo llegó primeramente a la Parraquia Nuestra Señora de Guadalupe –a un kilómetro de la Basílica de la Asunción de la Bienaventurada Virgen María– tras hacer un recorrido por los municipios de La Paz Centro y Nagarote.
A eso de las nueve de la mañana, Sándigo inició una procesión hacia la Catedral de León, custodiado por el comisionado general Ramón Avellán, acusado por organismos de derechos humanos de ser el responsable de la operación limpieza en Masaya, en julio de 2018.
Sándigo toma posesión en León en medio de varios señalamientos que lo tildan de ser cercano al régimen de Daniel Ortega por su discurso en una línea cercana al oficialismo. Ha dicho que el Movimiento Renovador Sandinista (MRS) manipula a los campesinos desde 2014; pidió “perdón por la violencia” de abril, sugiriendo que algunos obispos la provocaron; y su absoluto silencio, mientras sus homólogos convocaron a diálogos y condenaban en sus sermones la represión de la dictadura hacia manifestantes.
Monseñor René Sándigo llegó a la Iglesia de Guadalupe a eso de las nueve de la mañana, tras un recorrido por los municipios de La Paz Centro y Nagarote. Al llegar fue custodiado por el comisionado general Ramón Avellán, acusado de ejecutar la operación limpieza en Masaya. Foto: Carlos Herrera.
No hubo una masiva presencia de feligreses leoneses, pero sí una decena de buses de varios departamentos del país que llegaron a recibir a Sándigo. Fuera de la Catedral de León, la vida cotidiana se desarrollaba con normalidad. Los pobladores y turistas visitaban el parque central y los vendedores mantenían sus puestos. Foto: Carlos Herrera.
Después de encabezar una procesión hacia la Basílica Catedral de León, Sándigo fue recibido en la Catedral por varios obispos, entre ellos el cardenal Leopoldo Brenes y monseñor Bosco Vivas. Foto: Carlos Herrera.
Monseñor Bosco Vivas (centro) saluda a su sucesor, monseñor René Sándigo. Vivas se retira a sus 77 años. Hace tres años puso su renuncia como obispo de la diócesis de León, pero se mantuvo en el cargo por decisión de la Santa Sede, hasta que esta dispuso a Sándigo como nuevo obispo. Vivas tampoco ha estado exento de polémica, pues varios leoneses lo señalan de “desamparar al pueblo” durante la represión y la crisis que se ha vivido Nicaragua desde 2018. Foto: Carlos Herrera.
Archivado como:
PUBLICIDAD 3M
Periodista nicaragüense con tres años de trayectoria en cobertura de temas culturales y derechos humanos. Ganador del Premio Pedro Joaquín Chamorro a la Excelencia Periodística.
PUBLICIDAD 3D