Logo de Confidencial Digital

PUBLICIDAD 1M

PUBLICIDAD 4D

PUBLICIDAD 5D

Exagente policial salvadoreño: "Las pandillas no se han eliminado, solo están contenidas"

Fundador del Movimiento de Trabajadores de la Policía en El Salvador señala que hace falta un largo proceso de reinserción social y prevención juvenil

Habitantes de la quinta etapa de Las Margaritas, en Soyapango, juegan en la cancha de fútbol. Esta era una frontera con la comunidad Las Vegas, donde solía haber enfrentamientos entre la MS-13 y el Barrio 18 Sureños. Desde hace algunos meses, familias enteras llegan a este sitio y todos los días hay un partido de fútbol a partir de las 5:00 de la tarde. Foto de El Faro: Víctor Peña.

Redacción Confidencial

9 de febrero 2023

AA
Share

La desarticulación de las estructuras de las pandillas en las calles de El Salvador por parte del gobierno de Nayib Bukele le ha devuelto la tranquilidad al pueblo salvadoreño, pero todavía hace falta un largo proceso de "reinserción social y prevención juvenil" para evitar que estas agrupaciones vuelvan a surgir desde los centros penitenciarios donde se encuentran recluidas.

Luego de diez meses de un régimen de excepción, en los que han sido suprimidas garantías constitucionales y se han registrado graves violaciones a los derechos humanos, el gobierno de Bukele ha capturado a más 67 000 personas, de las cuales se estima que 93% pertenecían a las pandillas y 7% no tenían ningún vínculo con estas estructuras y fueron detenidos de forma arbitraria. 


El exagente policial y fundador del Movimiento de Trabajadores de la Policía en El Salvador, Marvin Reyes, valora que aunque las pandillas "ya no existen en los territorios", sus integrantes siguen siendo pandilleros y únicamente se encuentran "contenidos" en los centros penitenciarios del país.

Reyes, que por veinte años perteneció a la Policía Nacional Civil, explicó en esta entrevista que brindó al programa Esta Noche y CONFIDENCIAL que para erradicar la pandilla "tiene que pasar mucho tiempo", para que los jóvenes salvadoreños dejen de ver estas agrupaciones como "una opción de vida". El Estado tiene ese "reto muy grande porque la Policía —como poder coercitivo del Estado— ya hizo su parte, ya capturó, ya confinó a las pandillas en centros penales, ahora el Estado tiene que hacer su parte", apuntó.

Se cumplieron diez meses del régimen de excepción por parte del gobierno del presidente Nayib Bukele en El Salvador ¿Qué tan efectiva ha sido esa medida, ha conseguido desarticular a las pandillas?

Después de casi un año del régimen de excepción, las fuerzas de seguridad tanto de la PNC (Policía Nacional Civil) apoyadas por el Ejército han logrado capturar a la gran mayoría de pandilleros, siendo estos de la pandilla MS (Mara Salvatrucha) y de la pandilla (Barrio) 18 en sus dos facciones -Sureños y Revolucionarios- así como otras pandillas pequeñas que en El Salvador se encontraban en los territorios. Esto ha permitido que se registre más de 67 000 capturas, de las cuales consideramos que hay un 93% de pandilleros recluidos en los diferentes centros penales de nuestro país y un 7% serían personas que no tienen nada que ver con pandillas y que por diversas circunstancias han sido detenidos. Nosotros hemos señalado estos aspectos como acciones que se han extralimitado por parte de las fuerzas policiales y militares por cumplir cuotas de detenidos diarias que se impusieron en los primeros meses del régimen de excepción, esto llevó a los agentes policiales y a los soldados a capturar personas que no tenían nada que ver con estas estructuras, como para ir haciendo el número que les estaban pidiendo diariamente. 

Hemos platicado con el personal policial, las patrullas que andan en los territorios y también con personas civiles, y  el análisis nos indica que las estructuras de pandillas como tales ya no existen en los territorios. Ha quedado un pequeño remanente de algunos miembros que todavía se están capturando mediante trabajo de inteligencia, porque ahora ellos ya no están a la vista, se han ido a refugiar y prueba de esto es que la Policía ha ido capturando y se ha ido enfrentando en intercambios de disparos con miembros de pandillas en las zonas rurales, dando como resultado la captura de varios de estos sujetos y en la incautación de armas de fuego, fusiles más que todo y armas cortas, algunos tienen drogas en pequeñas cantidades en esos minicampamentos que han hecho, pero en sí, la pandilla en los territorios ya no tiene una estructura ya no hay. Hay unos miembros ahí que son como un remanente, un vestigio de lo que la pandilla fue, y la Policía tiene la misión de capturar hasta el último pandillero para que no vaya a generarse un rebrote de estas estructuras.

¿Qué impacto está teniendo el régimen de excepción en la seguridad ciudadana de la población?

Las personas se sienten ya más tranquilas, los salvadoreños en las diferentes colonias y en los diferentes barrios, se sienten más seguros, ya pueden realizar sus actividades de manera normal como se hacía hace muchos años y se pueden desplazar a sus trabajos con toda normalidad. El segundo fenómeno que nosotros hemos visto es un rebrote de la delincuencia común, el ladrón, el que hurta, el estafador, está creciendo… y esto tienen que ponerle atención porque no se puede descuidar, la delincuencia tiene muchas caras y esta delincuencia común que no estaba muy difundida, porque las pandillas estaban presentes en los territorios, en este momento está floreciendo. 

Nayib Bukele

El presidente salvadoreño Nayib Bukele, su ministro de defensa, René Merino Monroy y el director de la Policía Nacional Civil, Mauricio Arriaza Chicas, en las instalaciones del Centro de Confinamiento del Terrorismo inaugurado, en Tecoluca.
Foto: Confidencial | EFE.

En los primeros cuatro meses del régimen de excepción la Corte Suprema de Justicia salvadoreña, acumuló más de 1090 recursos de amparo por abusos de autoridad y atropellos cometidos por policías y militares ¿Cuáles son esos abusos y quiénes son los ejecutores?

Lo que nosotros hemos podido registrar son: capturas arbitrarias, tanto por elementos de la PNC como de la Fuerza Armada, y decimos nosotros que son arbitrarias porque son personas que han demostrado que no tienen absolutamente nada que ver con estructuras de pandillas, simplemente por cubrir una cuota que le exigieron al policía o al soldado se realizaron estas capturas. Allanamientos en viviendas sin una orden judicial para entrar y sacar jóvenes que supuestamente pertenecían a la pandilla y al final resultó que no, esto ha derivado en denuncias masivas en diferentes instituciones del Estado como la Procuraduría de Derechos Humanos, también en la Fiscalía y en oenegés que velan por los derechos de las personas. 

Nosotros trabajamos de la mano con el Socorro Jurídico Humanitario, una oenegé que apoya con asistencia jurídica a personas que han sido detenidas durante el régimen (de excepción), pero que no tienen absolutamente nada que ver con la pandilla. Solo en el Socorro Jurídico se tienen más de 2600 expedientes de personas que se han acercado a solicitar los servicios de un abogado porque su familiar no tiene absolutamente nada que ver con pandillas y se lo llevaron, incluyendo familiares de policías que fueron detenidos por otros compañeros policías. Es lamentable porque se perdió el esquema, se perdió ese parámetro, se enfocó directamente el combate a las pandillas que este régimen de excepción permitió que se diera y se extralimitó llevándose personas a la cárcel que no tenían nada que ver. Esto también ha derivado en denuncias puntuales en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos sobre violación de derechos humanos, muerte de personas en los centros penales, incluso la ONU mandó a llamar a funcionarios del Gobierno para que explicaran cómo estaban la situación de esas muertes en los centros penales durante este régimen excepción, muertes que tienen señales de tortura por inasistencia en sus padecimientos médicos, por diferentes causas que ha promovido que estas personas salgan fallecidas de los penales y ha derivado en estas denuncias a nivel internacional.

Usted dijo en una entrevista con El Faro que el gobierno de Nayib Bukele está transformando a la Policía Nacional Civil en una de corte militar ¿por qué?

La Policía se aleja de sus objetivos para los que fue creada. La Policía Nacional Civil nace de los Acuerdos de Paz, estos Acuerdos de Paz derivaron del conflicto armado que sufrimos nosotros durante más de 12 años, cuando se pone fin al conflicto y las partes se ponen de acuerdo, tanto el Ejército del Gobierno de ese momento y la guerrilla del FMLN (Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional) establecen en estos acuerdos la creación de la PNC y otras instituciones, y los principios en los cuales se tiene que basar la PNC en su actuación tienen que ser principios democráticos y tiene que ser dirigida por personas civiles. Todos estos parámetros en este momento se han perdido en la PNC  porque la institución policial está dividida, hay un 60/40, un 60% que avala todas estas políticas que incluyen violación de derechos humanos y extralimitación en sus funciones versus un 40% que está consciente que se debe respetar el marco jurídico de nuestro país, se debe respetar la Constitución y sobre todo no se debe violentar derechos humanos. Hay una fragmentación interna en la Policía Nacional Civil, el Estado convierte a la Policía Nacional Civil en un instrumento político, que ese es otro de los aspectos que se han perdido de los Acuerdos de Paz, porque la institución policial es apolítica, o sea, no tiene que tener ninguna vinculación con partido político alguno; sin embargo, este gobierno la ha instrumentalizado para fines políticos y le ha introducido en su doctrina aspectos de corte militar: obediencia ciega, no deliberante, que no cuestiones, que no diga absolutamente nada y solo acate lo que se le dice, cosa que es contraria a un Estado democrático a una Policía democrática a una Policía Nacional Civil, que tiene que tener en sus objetivos primarios la seguridad pública, el respeto a los derechos humanos y el respeto a los derechos políticos de sus ciudadanos. No está para reprimir al pueblo sino para acompañarlo, incluso, en sus luchas reivindicativas.

Usted fue parte de esta institución por veinte años y conoce también la evolución y la articulación de las pandillas en el interior del país ¿es sostenible este logro que aparenta la desarticulación total de las pandillas, el régimen de excepción ha eliminado las causas de las pandillas?

Las pandillas no se han eliminado, lo que se ha hecho es contenerlas en los centros penales. Ellos ahí están, ellos forman parte de la pandilla y están recluidos en los penales, ahí ellos se reúnen en sus en sus grupos, tanto de la pandilla 18 como de la MS, no se ha eliminado. Para erradicar la pandilla tiene que pasar mucho tiempo, tienen que pasar varios años, que las generaciones futuras ya no miren a la pandilla como una opción, para que el joven ya no vea la pandilla como un ejemplo a seguir… Ese aspecto es el que debe trabajarse sociedad para eliminar de la estructura mental, del mapa cognitivo de los jóvenes, ese anhelo de querer ser pandillero o de querer formar una organización que está al margen de la ley y que va a ir a reñir con las autoridades, con la Policía o el Ejército. Para eso se tiene que trabajar muchísimo en la prevención, en la creación de oportunidades para los jóvenes, en las fuentes de empleo, en la recuperación de las zonas que están complicadas económicamente donde estas pandillas tenían su caldo de cultivo. El Estado tiene ese reto muy grande porque la Policía, como poder coercitivo del Estado, ya hizo su parte, ya capturó, ya confinó a las pandillas en en centros penales, ahora el Estado tiene que hacer su parte y las otras instituciones que lo conforman, para que se genere la prevención, la reeducación de estos sectores de la sociedad y también desmontar aquellos aspectos de fronteras que crearon las pandillas, porque aquí en El Salvador hay fronteras invisibles que crearon las pandillas, en tal colonia era la pandilla 18, en otra colonia era la pandilla MS, y usted no podía ir, si vivía en sector 18 no podía ir al sector donde era MS porque lo asesinaban. 

Pandillas Nayib Bukele

Fotografía cedida por el gobierno de El Salvador, que muestra las instalaciones del Centro de Confinamiento del Terrorismo inaugurado, en Tecoluca (El Salvador). El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, inauguró, sin permitir el acceso a la prensa, el Centro de Confinamiento del Terrorismo, que tendría capacidad para 40 000 pandilleros.
Foto: EFE

Se estima que en El Salvador operaban más de 70 000 pandilleros ¿Cuál es el objetivo de la nueva cárcel que inauguró el presidente Nayib Bukele?

Esta cárcel que se ha inaugurado hace poco es una cárcel enorme, nosotros jamás habíamos visto tal infraestructura aquí en el país —porque hay cárceles grandes como el penal de Izalco que es una de las más grandes, el penal de Mariona también es un penal bastante grande— pero esta ha sido una infraestructura sumamente grande, se pretende, según información de la misma Presidencia, confinar 40 000 personas en ese centro penitenciario. Las condiciones en las cuales van a estar ellos ahí son condiciones de prisiones de alta seguridad, sin derecho a visita, con salidas controladas durante muy poco tiempo, donde también van a estar siendo llevados a que realicen alguna actividad para que no estén solo en el ocio y procurar que esta gente pague los años de cárcel que les impongan los tribunales, porque ese es el otro paso, el otro aspecto que hay que analizar. Nosotros tenemos un Sistema Judicial que va a juzgar a todos ellos y por supuesto les va a poner los años de cárcel que estipule el Código Procesal Penal, no los van a tener ahí para siempre, aquí no existe la cadena perpetua, pero nosotros suponemos que el Sistema Judicial va a funcionar de tal manera que va a condenar a estos miembros de pandillas por los delitos que hayan cometido y será el sistema carcelario que busque la manera de reeducar a estas personas porque en algún momento tienen que salir, dentro de 30 años, dentro de 40 años, no sabemos si ellos van a morir o qué, pero algunos de ellos van a salir.

Hay 40 000 presos, pero ¿dónde están los demás, hay indicios de que hayan huido para reubicarse en otros países de la región?

Solo en el penal nuevo van a haber 40 000, en otros penales del país está el resto de detenidos, ya vamos llegando casi a los 70,000 presos… Una buena parte (de pandilleros), sobre todo los líderes, huyeron del país cuando comenzó el régimen de excepción. Esto nos da a pensar que les avisaron con tiempo para que huyeran o que tenían fuentes internas para saber que se estaba generando toda esta estrategia de capturas a través del régimen de excepción. Han huido, en su mayoría, para Guatemala; otra parte ha huido a Honduras y nos han llegado informes de que ya ubicaron pandilleros en Chile, no sabemos cómo han llegado hasta allá, pero hay fuentes que nos han contactado desde Chile porque han detectado (miembros de la pandilla) MS hasta en ese país, que han huido en los últimos días y han tenido registros de ingresos al país del sur. Entonces, hay una buena parte que ha huido definitivamente y ya no van a regresar, si regresan se exponen a que sean capturados y llevados a la cárcel. Entonces, en los países donde se han asentado pueden buscar la manera de ir reestructurando la pandilla, ahí, los Gobiernos deberán realizar las acciones necesarias para contener esta situación porque el pandillero siempre va buscando generar los ambientes donde él se ha desarrollado, donde él ha vivido, y él va a ir a crear otra pandilla allá donde ha ido a huir.

PUBLICIDAD 3M


Tu aporte nos permite informar desde el exilio.

La dictadura nos obligó a salir de Nicaragua y pretende censurarnos. Tu aporte económico garantiza nuestra cobertura en un sitio web abierto y gratuito, sin muros de pago.



Redacción Confidencial

Redacción Confidencial

Confidencial es un diario digital nicaragüense, de formato multimedia, fundado por Carlos F. Chamorro en junio de 1996. Inició como un semanario impreso y hoy es un medio de referencia regional con información, análisis, entrevistas, perfiles, reportajes e investigaciones sobre Nicaragua, informando desde el exilio por la persecución política de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.

PUBLICIDAD 3D