21 de julio 2023
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Un nuevo feudo familiar se gesta en el servicio diplomático de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, quienes designaron a Ramón Moncada Colindres, hermano del canciller del régimen, Denis Moncada Colindres, como embajador de Nicaragua en Irán y Siria.
El nombramiento de Ramón Moncada no ha sido oficializado con una publicación en La Gaceta, Diario Oficial del Estado, pero fue anunciado por Murillo en su monólogo del martes 18 de julio. Moncada, además, ya está llevando a cabo funciones diplomáticas en Teherán y Damasco.
“Hoy anunciamos que nuestro hermano Ramón Moncada Colindres, quien es embajador, representando a nuestro pueblo y Gobierno en Teherán, Irán, ha recibido el beneplácito también como embajador concurrente desde Irán ante el pueblo y Gobierno de la República Árabe Siria”, mencionó Murillo en su alocución ante los medios de la propaganda de la dictadura.
Como ha sido una constante en los feudos familiares promovidos por el régimen, Moncada no tiene experiencia ni tampoco estudios en el campo de la diplomacia. Es abogado, estuvo en el Ejército de Nicaragua, en el que alcanzó el rango de mayor, y fue funcionario de la Alcaldía de Managua en el departamento de urbanismo.
Se desconoce desde cuándo Moncada está residiendo en Teherán. El portal de propaganda del régimen, El 19 Digital, reportó que este realizó un convivio en la sede diplomática en conmemoración del 44 aniversario de la Revolución Popular Sandinista.
“El embajador Moncada ofreció una exposición sobre los antecedentes de la fundación del FSLN y un breve relato histórico de las heroicas luchas de las décadas de los 60 y los 70 que culminaron con el derrocamiento del régimen opresor del dictador Somoza y el triunfo de la Revolución Popular Sandinista en 1979”, cita el reporte del medio de propaganda.
Lo que si oficializó el régimen en relación a la sede diplomática en Teherán por medio del acuerdo ministerial 27-2023, publicado en La Gaceta de este jueves 20 de julio, es la cancelación del nombramiento de Bianka Valeska Valenzuela Ponce, como ministra consejera con funciones consulares, cargo para el que apenas había sido nombrada el 15 de enero de 2023.
Sustituyó a expresidente de UNEN
El 31 de mayo de 2023, el régimen Murillo removió a Isaac Lenin Bravo Jaen del cargo de embajador de Nicaragua en la República Islámica de Irán. Una decisión que sorprendió porque apenas dos semanas antes de su remoción, la propaganda oficialista elogiaba su gestión diplomática.
Bravo fue presidente de la Unión Nacional de Estudiantes de Nicaragua (UNEN), el brazo represor de la dictadura en las universidades. Se encontraba al frente de la embajada en Teherán desde el 9 de enero de 2020, como parte del aparato de represión del Frente Sandinista premiado por Ortega tras la masacre a las protestas ciudadanas de 2018.
Durante la gestión de Bravo, el régimen estrechó relaciones diplomáticas con Irán y buscó una alianza militar, según revelaciones de The New York Times. En sus primeras palabras, como diplomático, el funcionario dijo que la República Islámica era un “símbolo de resistencia frente al acoso del imperialismo estadounidense”.
Nicaragua e Irán han estrechado relaciones bajo la dictadura orteguista. El 14 de junio de 2023, el presidente de Irán, Ebrahim Raisí visitó Nicaragua, y advirtió que los vínculos entre ambos países no son “habituales o tradicionales” sino que se trataban de relaciones “completamente estratégicas”.
Producto de esta visita, Irán y Nicaragua firmaron tres memorándums de entendimiento en los cuales prevalecen las muestras de solidaridad mutua, pero no señalan grandes acciones para fortalecer la cooperación.
Los tres memorandos de entendimientos fueron firmados por el canciller nicaragüense, Denis Moncada Colindres, y su homólogo iraní, Hossein Amir-Abdollahian y el ministro de Salud y Educación Médica, Bahram Einollahi. Todos tienen una duración de cinco años y será renovado automáticamente por un periodo igual, a menos que una de las partes notifique al otro la intención de rescindirlo.
El nuevo feudo familiar
El feudo familiar promovido por el canciller Denis Moncada se suma al del embajador Gadiel Francisco Arce Mairena, quien tiene a sus hijos Gadiel Osmani y Zhenia Ruth Arce Zepeda, quienes tampoco tienen estudios diplomáticos, con representaciones ante Brasil y Corea del Sur.
El feudo familiar con mayor vigencia en el cuerpo diplomático del régimen es el de Francisco Campbell, embajador ante Estados Unidos, quién tiene a su esposa Miriam Hooker, como cónsul de la embajada de Nicaragua en Washington y su hija, Mabel Leilani Campbell Hooker, como agregada de Prensa y Cultura de la misma sede diplomática.
Su hijo, Michael Campbell Hooker, fue embajador ante la Organización de Estados Americanos (OEA) y ante la India, cargos de los que removido en 2022, pero todavía conserva el de ministro asesor del presidente para las Relaciones Internacionales con el Gran Caribe, para lo cual fue nombrado en abril de 2021.
Recientemente el régimen desarticuló el feudo familiar del exvicecanciller Manuel Coronel Kautz, quien tuvo a sus dos sobrinos, Ian y Rodrigo Coronel, como embajadores ante China, Corea del Sur, Filipinas y Tailandia, hasta que finalmente fueron descartados por la dictadura.
