27 de diciembre 2017
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Tradicionalmente, la inteligencia artificial (IA) ha sido asociada a un robot haciendo tareas cotidianas como limpiar la casa. Sin embargo, la IA involucra --entre otras cosas-- el uso de una máquina (computadora) para aprender de datos tales como letras, números, imágenes digitales y sonidos. La gran ventaja de los sistemas basados en IA radica en el uso de métodos estadísticos y matemáticos para el descubrimiento de patrones y tendencias que no son obvios a los ojos humanos.
Actualmente compañías como Facebook, Google y Amazon están invirtiendo muchos recursos para explotar datos públicos con el fin de generar conocimiento sobre tendencias de mercado, publicidad personalizada, popularidad de sus productos, reconocimiento de rostros y especialmente patrones de comportamiento humano (por ejemplo: ¿Cuántos “likes” le van a dar a mi foto en Facebook?). Otras compañías como Tesla buscan una forma de utilizar técnicas de IA para producir automóviles que no necesiten de un conductor, entre otras cosas.
Estamos siendo testigos de una revolución en cada aspecto de nuestros estilos de vida gracias a la aplicación de métodos de inteligencia artificial y esto, en mi humilde opinión, constituye una gran oportunidad para el país desde el punto de vista económico y científico. Cuando hago este comentario a mis amigos siempre tengo la misma objeción: Nicaragua no cuenta con la infraestructura y los recursos humanos para poder tomar ventaja de esta tecnología. ¡Yo no estoy de acuerdo!
Ciertamente, se requiere de una gran inversión para desarrollar una infraestructura dedicada a la recolección y análisis de datos, además de facilitar el acceso a recursos computacionales a la población. Esto es algo que debe de tomar una alta prioridad en la agenda de elaboración de políticas del país. Sin embargo, aún es posible utilizar plataformas públicas para estudios de pequeña y mediana escala, tales como el proyecto Galaxy o Github.
En el campo científico, existen muchas bases de datos - tales como NCBI BioProject, ExPASy, PubMed Central, dedicadas a almacenar y procesar datos biológicos de miles de experimentos con el fin de hacerlos accesibles al público sin costo alguno. Estas bases de datos presentan al investigador valiosos recursos que pueden ser utilizados para la generación de nuevas hipótesis de investigación, diseño y reimplementación de estudios, y validación de resultados. Existen bases de datos para otros campos tales como economía, sociología, leyes, etc, que pueden ser utilizados de la misma forma y pueden ser explorados con el Google Public Data Explorer.
Toda esta información, que normalmente tendría un costo de generación muy alto, se presenta en formatos que facilitan su análisis: el investigador sólo requiere de una computadora y dar rienda suelta a su imaginación, algo que el ciudadano nicaragüense sabe hacer muy bien.
Ahora que ya tenemos nuestros datos y la infraestructura básica para analizarlos, necesitamos abordar el aspecto más importante: el recurso humano. La aplicación eficiente y efectiva de métodos basados en IA requiere de las ciencias de la computación, estadísticas y matemáticas, entre otras. Estas carreras están disponibles en la mayoría de los programas académicos en las universidades públicas y estatales del país y las autoridades facultativas deben de poner énfasis en la formación de ‘data scientist’ como parte del perfil profesional. Estoy seguro que muchos talentosos jóvenes nicaragüenses se beneficiarán de estos cambios.
En muchas ocasiones, las interesadas en analizar datos no tienen la formación necesaria en ciencias de la computación, estadísticas o matemáticas, lo cual hace la tarea muy frustrante. Las buenas noticias es que hay recursos disponibles diseñados para que cualquier persona, sin importar formación, edad o interés, pueda aprender a usar lenguajes de programación - R o Python - en plataformas gratuitas como Software Carpentry, y al mismo tiempo aprender estadística y matemáticas en cursos impartidos por prestigiosas universidades en Coursera y edX de forma gratuita.
Todos estos recursos están disponibles de forma gratuita a cualquier persona con una laptop … y muchas ganas de aprender. En una época en la que pasamos dos horas en promedio navegando y agregando datos en redes sociales, esto no debería de ser un problema para las personas que tenemos el privilegio de tener este tipo de acceso.
La investigación computacional provee a otras ramas de la ciencia con herramientas de bajo costo y fácil acceso, además de ayudar en la generación de nuevas ideas y métodos de análisis en distintas áreas. El 15 de Diciembre de 2017, la NASA utilizó por primera vez inteligencia artificial en el descubrimiento de un nuevo planeta en el sistema Keppler-90. Es posible que esta aplicación no sea muy relevante para el lector, sin embargo existen otras aplicaciones más relevantes, tales como la mejora en servicios de salud con el estudio de records clínicos de los hospitales, el rediseño de las rutas de transporte en las distintas ciudades del país, la distribución eficiente de recursos energéticos y acuáticos, el desarrollo de metodologías y plataformas por compañías nicaragüenses, entre otras. Es posible que muchas de estos proyectos se estén ejecutando en el país actualmente.
Las universidades nicaragüenses e instituciones como la Academia de Ciencias de Nicaragua deben de alentar a los estudiantes e investigadores a explorar los beneficios de la inteligencia artificial y la gran abundancia de datos disponibles.
*El autor es doctor en biología computacional e inteligencia artificial por el Karolinska Institutet, e investigador postdoctoral en el Francis Crick Institute.
