4 de agosto 2023
AA
El obispo auxiliar de Managua, Silvio José Báez, denunció desde su exilio en Estados Unidos que la dictadura orteguista ha sometido a monseñor Rolando Álvarez Lagos, obispo de Matagalpa, a “una farsa de proceso judicial que ni ellos mismos se creen”.
“Quienes, sedientos insaciables de poder y cegados de soberbia y de maldad, tienen sometida a Nicaragua, quieren mostrarte como responsable de delitos inexistentes que ellos mismos se han inventado”, dijo Báez en un mensaje divulgado este viernes 4 de agosto de 2023, cuando se cumple un año de cárcel del obispo Álvarez.
“Tu palabra y tu presencia incomodaba a los tiranos, por eso te han encarcelado. Los ahogaba tu palabra profética, que ha hecho resonar en todo el país la frescura del evangelio de Jesús. Se sentían temerosos ante tu capacidad de hacer soñar al pueblo con una sociedad nueva, en donde se pudiera cosechar la tierra con esperanza, trabajar con dignidad, opinar sin miedo, moverse con libertad y sonreír con el corazón”, señaló el obispo.
Agrega: “Te han apresado, Rolando, porque se atemorizaban ante un humilde obispo que caminaba, bailaba y cantaba con la gente sencilla. Temblaban cuando tú hablabas de justicia y de verdad, cuando defendías a las víctimas y alzabas la voz por la madre tierra. Se sienten juzgados y condenados cada vez que resuenan en sus oídos tus inolvidables palabras: ‘Respete la patria’”.
Hace un año, fuerzas especiales de la Policía impidieron la salida del palacio episcopal de Matagalpa al obispo Álvarez, seis sacerdotes y seis laicos que se dirigían a ofrecer una eucaristía la catedral de la ciudad. Ese día, antes que los antimotines sitiaran la parroquia y bloquearan la salida con porras y escudos, líder religioso salió del palacio episcopal, se puso de rodillas en la acera, elevó sus manos hacia el cielo y recibió de un colaborador la imagen de Jesús Sacramentado y con el Santísimo se acercó a los oficiales, que se retiraron, en una imagen que se viralizó en redes sociales.
“Quienes te han secuestrado, terminarán siendo víctimas de su corazón endurecido y lleno de oscuridad. Un día tendrán que dar cuenta ante la justicia de los hombres y ante el tribunal de Dios. Ellos no aman la vida, no conocen el amor, se atemorizan ante el poder de la oración, no temen a Dios. Tú, hermano, querido, verás la luz y serás libre”, indicó Báez.
Se negó a ser desterrado por la dictadura
El obispo Álvarez fue sentenciado a más de 26 años de prisión por supuesta “traición a la patria”. La condena contra el alto jerarca fue dictada un día después rechazó subirse a un avión que lo desterraría, junto con otros 222 excarcelados políticos nicaragüenses, a Estados Unidos, lo que provocó la indignación de Ortega, quien lo calificó de “soberbio”, “desquiciado” y “energúmeno”.
El papa Francisco calificó como una “dictadura grosera” al Ejecutivo de Ortega en Nicaragua, un mes después de esa condena, según una entrevista publicada en el medio argentino Infobae, el 10 de marzo de 2023. “Con mucho respeto, no me queda otra que pensar en un desequilibrio de la persona que dirige (Ortega). Ahí tenemos un obispo preso, un hombre muy serio, muy capaz. Quiso dar su testimonio y no aceptó el exilio”, aseveró Francisco.
En reacción a las declaraciones del papa, Ortega suspendió unilateralmente las relaciones diplomáticas con la Santa Sede. Asimismo, el mandatario nicaragüense ha calificado de “mafia” a la Iglesia católica y la acusó de ser antidemocrática por no permitir que los católicos elijan por voto directo al papa, a los cardenales, a los obispos y a los sacerdotes.
No estás solo
Báez se exilió en 2019 para resguardar su vida y obedeciendo una orden del santo padre. Desde el exilio, es una de las voces de la Iglesia católica nicaragüense que ha mantenido la denuncia constante de las violaciones a derechos humanos perpetradas por el régimen orteguista.
“Siento como propio este tiempo de oscuridad y de sufrimiento que vives, porque yo sé por experiencia lo doloroso que es para un obispo verse obligado a estar lejos de su pueblo. No he dejado de recordarte en mi oración, de mencionar tu nombre, de denunciar la injusticia que cometen contra ti y de exigir tu liberación incondicional”, expresó el obispo auxiliar de Managua.
“No estás solo. Allí donde estés, aún confinado y solitario, allí estamos contigo todos los que te queremos. Te acompaña el amor de tu familia, que sufre angustiada tu ausencia. Te acompaña con su cariño y su oración el pueblo de Dios que se confió a tu ministerio pastoral en Matagalpa y Estelí y toda la Iglesia de Nicaragua. Te acompañan las voces y el corazón de tantos nicaragüenses que te quieren y te admiran y han visto en tu persona y en tu vida una luz y una esperanza para nuestra sufrida patria”, le animó monseñor Báez a su amigo.
“Dios actuará, quizás no en el tiempo y de la forma que imaginamos, pero actuará, liberándote de las cadenas inicuas que te atan y renovando tu vocación de pastor al servicio de tu pueblo”, finalizó su mensaje.
