12 de septiembre 2024
Al menos 79 de cada 100 niños que cursan la etapa final de la educación Primaria en Nicaragua tienen problemas de compresión lectora, revela el informe "Pobreza del Aprendizaje 2024", elaborado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) y el Banco Mundial.
"Según los últimos datos disponibles (antes del cierre de escuelas relacionado con el covid-19), el 79% de los niños en Nicaragua al final de la escuela Primaria hoy no dominan la lectura", indica el documento.
De acuerdo con el informe, con esos datos Nicaragua se ubica 27 puntos porcentuales por debajo de la media de América Latina y el Caribe; además de 18 puntos porcentuales peor que los países de renta media baja a nivel mundial.
Señalan que en el caso de los países de ingresos bajos y medianos, "más de la mitad de los niños no pueden leer ni comprender un texto breve apropiado para su edad al final de la escuela primaria".
"Esta crisis de aprendizaje amenaza los esfuerzos de los países por desarrollar capital humano y alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), socavando el crecimiento sostenible y la reducción de la pobreza", advierten.
De acuerdo a medios de propaganda del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, en febrero de 2024 se inició la campaña "Comprensión Lectora", con el objetivo "que los alumnos puedan entender el contenido en las lecturas que realicen". Sin embargo, se desconoce el alcance, duración y metodología de dicha campaña.
4% de niños en edad escolar no estudian en Nicaragua
El informe menciona que en Nicaragua el 4% de los niños en edad de asistir a la escuela primaria no están matriculados, un promedio similar a la media en la región.
También informa que el gasto en educación primaria por niño en edad de educación primaria en Nicaragua es de 858 dólares, lo que representa un 69% por debajo del promedio de la región de América Latina y el Caribe.
"La falta de datos impide realizar comparaciones de la pobreza de aprendizaje de niños y niñas", señala la investigación.
Sobre la falta de periodicidad de las evaluaciones, señalan que Nicaragua participó en la evaluación realizada por el Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación (LLECE), de la Unesco, en 2006, 2013 y por última vez en 2019. Sin embargo, la última vez que Nicaragua administró una Evaluación Nacional a Gran Escala (NLSA, por sus siglas en inglés) al final de la escuela primaria fue en 2015.
El informe detalla que en los últimos cuatro años, al menos 102 países no han informado sobre el ODS 4.1.1, relacionado a la calidad educativa. "Nicaragua es uno de los países que se considera en camino de reportar el ODS 4.1.1 ya que ha reportado al menos dos puntos de medición de los ODS en los últimos cuatro años", destacan.
“Esto es un desafío, tanto para los países que no saben si sus niños están en vías de alcanzar los objetivos mínimos mundiales de aprendizaje para el desarrollo infantil, como para la comunidad mundial, que no sabrá si se están cumpliendo las metas de los ODS”, indican en el informe.
Menos maestros en Nicaragua
Nicaragua perdió 2931 maestros entre 2019 y mayo de 2024, reveló el reportaje "Aulas de Nicaragua se quedan sin maestros" publicado por CONFIDENCIAL, basado en las cifras de distribución del empleo por categoría ocupacional en el Gobierno central, que publicó el Banco Central de Nicaragua (BCN).
De acuerdo con ese informe, el sistema de educación pública hasta mayo de 2024 tenía 50 026 docentes, lo que significa 395 menos que en diciembre de 2023 cuando el país cerró con 50 421 maestros para todo el país.
2019 fue el último año con crecimiento de docentes contratados, con un total de 52 957 personas para todo el sistema de educación pública. Mientras, 2023 fue el año con mayor baja en el número de docentes: 1047 menos.
El reportaje de CONFIDENCIAL revela que con mayor frecuencia los maestros renuncian tras denunciar hostigamiento del régimen, además que son obligados a adoctrinar a los estudiantes de Nicaragua.
Los educadores han denunciado también que los libros que distribuye el Ministerio de Educación (Mined) incluyen contenido relacionado al culto a la personalidad de Ortega y Murillo. Además, la bandera roja y negra ha sido impuesta en los colegios y en los actos educativos de todo el país.