17 de octubre 2015
La decisión de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos (OFAC) de declarar a las empresas del Grupo Continental de Honduras “como empresas que desempeñan un papel significativo en el tráfico internacional de narcóticos” ha generado alertas en el sector empresarial del país, que sigue con atención las noticias que llegan desde Tegucigalpa. Consultados por Confidencial, empresarios, banqueros y exfuncionarios del sistema de regulación de finanzas del país expresas sus impresiones sobre el escándalo que ha golpeado a la poderosa familia Rosenthal en Honduras.
“Hay preocupación”
- Mercedes Margarita Deshón, ex Gerente General del Banco Uno
“Lo que yo veo con preocupación es que aquí no ha habido un juicio: lo que hay es una acusación. No ha habido una oportunidad de presentación de prueba de las partes”, explica Mercedes Margarita Deshón, ex Gerente General del Banco Uno. “Con sólo aparecer en esa lista, es como una muerte civil, porque esas empresas no tienen derecho a defensa, el Banco fue intervenido por resolución de la Superintendencia de Bancos”, añadió.
“No hay un precedente sobre esto. La lista de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés), del Departamento del Tesoro de Estados Unidos donde fue incluido Jaime Rosenthal y sus empresas asociadas, es una lista que todo banquero conoce. Antes de otorgar un crédito, o permitir que una persona haga un depósito en un banco, abra una cuenta o establezca una relación bancaria, se consulta la lista OFAC. Si alguien está en esa lista no puede haber transacción”, explicó.
Deshón también dijo que “la lista OFAC tiene que ver con prevención de lavado de dinero. Quienes aparecen en esa lista son personas que han sido sospechadas de tener nexos muy cercanos, ya sea con el narcotráfico o participando directamente en esa actividad económica”.
Siendo que “es primera vez que un banco extranjero aparece en esa lista”, por lo que “no hay precedente sobre esto”, la ex banquera observa que “el gobierno de Honduras y la Superintendencia de Bancos de Honduras actuó de la manera que consideraron correcta para prevenir un riesgo sistémico, que es el temor más grande de cualquier sistema financiero: que se ‘contagie’ todo el sistema, y que haya desconfianza total”. “No hay precedentes”, insiste, lo que explica que quienes están alrededor del sistema financiero nacional estén siguiendo el caso muy de cerca, “porque no hay manual que nos diga cómo se va a desenvolver” el caso, explica.
“Ciertamente hay preocupación. No hay banco en el mundo, creo yo, que no esté sujeto al riesgo de lavado de dinero. Puede tener todos los sistemas, todos los procedimientos, todo el personal capacitado haciendo las preguntas correctas, pero del otro lado hay igual o mejor astucia en buscar cómo mezclar dinero lícito con ilícito para que comience a fluir en el sistema financiero. Entonces sí es un poco preocupante”, valoró Deshón.
“Nuestra tarea es prevenir”
- Miguel Ebenberger, Gerente Genreal de Procredit.
El Gerente General de ProCredit, Miguel Ebenberger, opina que “Nicaragua como país está bastante blindado ante ese tipo de actividades ilícitas”, aunque no puede decir lo mismo de Honduras. No sólo por las noticias que llegan de Tegucigalpa y San Pedro Sula, sino porque el Grupo ProCredit ya tuvo un banco en ese país.
“Seguramente nos meten algún gol, pero más allá de lo que está pasando con la familia Rosenthal, nuestra tarea es prevenirlo, porque uno como banco corre el riesgo de participar, sin saber, de una actividad financiera ilícita, como el financiamiento al terrorismo. Recordemos que se trata de personas que secuestran, que usan la violencia para enriquecerse”, detalló.
“Lo bueno es que nosotros podemos cooperar un poco como Grupo. Sentimos que [nuestro país] no es un lugar que esté muy expuesto. Nosotros podemos comparar, porque tuvimos un banco en Honduras, y por eso te puedo decir que el contexto de trabajo en Honduras desde ese punto de vista, es mucho más complicado: hay maras, mafia… y todo eso está relacionado”, relató.
El banquero dijo que “en cierta forma, esa fue una de las razones por las que el Grupo [ProCredit] evaluó que en ese contexto era muy difícil hacer un trabajo sensato. Es una lástima, porque por supuesto que Honduras también requiere de impulsos para lograr un desarrollo económico y social”.
Ebenberger dijo que “lo que me sorprendió en Honduras es que el regulador no discutió nada. Simplemente cerró el banco. Me parece positivo, pero no es algo que uno esperaría. Podrían haber dicho ‘no estamos de acuerdo. Los Rosentahl son sólo sospechosos’, pero la Comisión de Bancos reaccionó, aun sin mandato de un juez local. Es sorprendente que esa entidad haya reaccionado tan rápido. Si fue la reacción correcta o no, esa es otra pregunta”, valoró.
“Conoce a tu clientela”
- Noel Ramírez, expresidente del BCN
Para el economista Noel Ramírez, ex presidente del Banco Central de Nicaragua, la principal tarea de prevención comienza por “conocer a tu clientela”.
El experto también observa que el Banco [Continental] fue intervenido por las autoridades hondureñas debido a que se le congelaron activos, como consecuencia de las acusaciones del gobierno de Estados Unidos. Ello redujo la adecuación de capital del Banco, situándola por debajo de la requerida por las normas prudenciales de Honduras”.
A su juicio, “si el día de mañana, las acusaciones de lavado que provocaron esta situación no tuviesen fundamento, los accionistas del Banco podrían reclamar la indemnización correspondiente. Todos sabemos que uno es inocente hasta que una sentencia firme te declare culpable”, recordó.
“Crea incertidumbre”
- José Adán Aguerri, presidentel del COSEP.
José Adán Aguerri, Presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), consideró que “esta primera ola no tendrá repercusión en Nicaragua. Es preocupante porque crea un nivel de incertidumbre en el ámbito empresarial, y en las mismas relaciones comerciales que existen entre grupos de esta magnitud”.
Aguerri opina que las dudas serán mayores cuando la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig), comience a llamar a los empresarios que aparecen conectados con el esquema corrupto denominado ‘La Línea’.