11 de julio 2018
La brutal represión del Gobierno de Daniel Ortega contra los nicaragüenses que exigen su salida del poder, tras más de diez años como presidente, acumula más de 250 fallecidos y ha logrado desmontar tranques y barricadas en la mayoría del país. El objetivo de Ortega, asegura el analista político Oscar René Vargas, es permanecer en el poder, pero advierte que su permanencia significará más inestabilidad económica, pobreza y muerte, que califica como "un retroceso extraordinario".
Vargas sostiene que la respuesta para frenar la pretensión de Ortega es “elevar la parada”, fortaleciendo el movimiento social, y realizando movilizaciones este jueves, viernes, sábado y domingo, en las distintas ciudades del país, con el objetivo de dar ánimos a la población y demostrarle al gobernante que no ha ganado esta batalla.
“La respuesta es elevar la parada. La lógica de Ortega es como en la guerra. Él ya golpeó y si él golpeó, hay que responderle. Como no tenemos las armas, se tiene que golpear de manera cívica. Se tiene que jugar con esa estrategia, para demostrarle que la población, a pesar de la represión, tiene suficiente músculo social y cívico para seguir adelante. Que el movimiento social se fortalezca y obligue a Ortega a renunciar”, explica el analista.
El pasado siete de julio, el presidente Ortega descartó convocar a elecciones anticipadas para solucionar la grave crisis que atraviesa Nicaragua, desestimando la propuesta de adelantar las elecciones de 2021 para marzo de 2019, como lo han planteado la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN), el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, y diversas naciones y grupos internacionales.
“El presidente Ortega no va a renunciar en frío. Será en caliente. Y cuando digo en caliente, se trata de que el movimiento social sea tan fuerte que tenga que hacerlo retroceder. Es decir, que si quita un tranque, este se debe volver a poner. El ejemplo más claro es el de Jinotega. Para él los tranques son un problema porque esto le demuestra la capacidad de movilización de la gente y este es su punto débil”, explicó Vargas, en entrevista con el programa de televisión Esta Noche.
El ejemplo de los banqueros
Vargas recordó el caso de los banqueros, a quienes el Gobierno les solicitó que entregaran la lista de los clientes que habían retirado más de 50,000 dólares de sus cuentas a partir del 19 de abril del 2018. Días después, el Gobierno renunció a su intento ilegal de conocer esta información.
“Es el ejemplo más claro. Los banqueros dijeron ‘no’ y el Gobierno tuvo que retroceder. Él retrocede si vos te ponés firme. Si nosotros no creemos que somos capaces de echarlos para atrás, estamos perdidos, pero si creemos, sería la única solución. Tenemos es ir hacia adelante”, recalcó el analista político.
José Pallais, jurista y miembro del Frente Amplio por la Democracia (FAD), agregó que las salidas que se le han planteado al presidente Daniel Ortega para que deje el poder, han sido constitucionales y que en ningún momento se ha pensado en proponer una, fuera del marco legal de la Carta Magna.
“Todas las propuestas han estado en el marco legal, la renuncia es constitucional al igual que la reforma constitucional para elecciones anticipadas. Esto ya se ha hecho. La ruptura constitucional no ha estado en ninguna de las mentes de los actores”, insistió el jurista.
Pallais aseguró que la crisis por la que atraviesa el país, pudo solucionarse con solo el hecho de que el presidente Ortega dijera que estaba dispuesto a terminar con su Gobierno, en aras de la paz, y así evitar el deterioro de la economía, tal y como lo hizo previo a las elecciones que ganó Violeta Barrios de Chamorro, en 1990.
Ejército niega participación en "operación limpieza"
El Ejército de Nicaragua emitió un comunicado en el que rechazó la “campaña calumniosa… y el montaje de actos donde nunca hemos estado, las falsas informaciones e imágenes manipuladas que tienen como objetivo hacer creer el involucramiento de personal y armamento en actividades de orden público”.
En el documento, el cuerpo castrense sostiene que tiene el control absoluto de su personal, armamento y medios de todo tipo, además agrega que “no existe un solo hecho donde esté involucrado personal de nuestra institución”.
“Las misiones y tareas que actualmente cumplimos son las dadas a conocer en el comunicado número 01 del 12 de mayo de 2018”, finaliza el documento.
El comunicado oficial no menciona ni una palabra sobre los grupos paramilitares que actúan coludidos con la Policía Nacional para desmontar barricadas y disparar contra los ciudadanos de distintas ciudades del país.
El jurista José Pallais manifestó que el Ejército ha incumplido su mandato constitucional de ser el garante de que solo puede existir en el país un cuerpo armado, sometido a la constitución, para defender al pueblo. Expresó que el rol del cuerpo castrense, de “inercia o complicidad”, va a tener serias consecuencias en el futuro, pues muchos sectores van a cuestionar su falta de acción ante la actual situación.
Para Vargas, la inacción del Ejército va romperse a medida que la sociedad nicaragüense tenga una actitud firme y decidida, pues esto afectaría las bases del cuerpo militar y su estructura comenzaría a tener fisuras, siendo esta la única manera de que el Ejército tenga una actitud diferente.
“Además que el Ejército ya está sufriendo las consecuencias de la crisis que atraviesa el país”, aseguró Pallais.
La sesión en la OEA
Este miércoles el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA), se reunirá para abordar la situación actualizada de Nicaragua en materia de derechos humanos.
Para Pallais lo más importante es que el escrutinio de la OEA sobre el comportamiento del Gobierno de Ortega se mantiene, pese a que él pretendía que se descontinuara producto de la resolución que negoció semanas atrás con Estados Unidos. No obstante, según el jurista, continuará abierto en la sesión y “debemos esperar que tampoco se cierre”.
Vargas recordó que no hay que perder de vista que este jueves habrá una reunión del Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes sobre el tema Nicaragua. Sobre la reunión en la OEA el analista político manifestó que es “muy difícil saber lo que va a pasar” pero podría esperarse que se haga referencia a la Carta Democrática.
“En ese sentido Ortega quedaría en una situación mucho más difícil, el escenario internacional no es favorable. Él piensa que todas las resoluciones no van a influir, y piensa que, por la lógica de guerra que tiene en su cabeza, él tiene que ganar la guerra aquí y que los enemigo somos nosotros, los que estamos en contra de su permanencia en el poder”, dijo Vargas.
Pallais consideró que Ortega va a negociar, pero no con los nicaragüenses, pues no ha sido ni será su lógica. Explicó que prueba de esto es que en su último discurso no atacó a Estados Unidos, a pesar de que recién habían aprobados sanciones para sus “hombres cercanos”, y esto se debe a que quiere preservar un puente que está abierto, y que quiere seguir explorando.
“Su negociación y su salida, la va a usar y ese es una señal positiva, pero la va a usar con la comunidad internacional, negociando directamente con ellos, porque la gobernabilidad no se puede construir sobre un montón de cadáveres. La situación social no permite que Ortega pueda terminar su periodo aunque tenga la voluntad de hacerlo”, finalizó Pallais.
FAD se pronuncia sobre crisis en Nicaragua
El Frente Amplio por la Democracia (FAD) emitió un pronunciamiento denominado "SOS Nicaragua", ante el incremento del ataque de fuerzas policiales y paramilitares en contra de la población nicaragüense. El documento expone tres puntos y será enviado a las representaciones permanentes ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), que sesionan este miércoles sobre la situación de los derechos humanos en Nicaragua.
"Estamos claros que es necesario y urgente la unidad de todo el pueblo de Nicaragua, de todo nicaragüense organizado y no organizado que está dando la batalla contra esta dictadura. Tenemos que ir reforzando los canales de comunicación y articulación pues es la única forma de terminar con la barbarie que se ha impuesto en Nicaragua", explicó Violeta Granera, coordinadora nacional del FAD.
El primer punto del pronunciamiento exige la salida inmediata de Ortega y Murillo, por haberse convertido en la principal amenaza a la seguridad ciudadana "como directores de violación a los derechos humanos”. El segundo inciso solicita al "Ejército de Nicaragua cumplir con sus funciones constitucionales para proceder a la desmovilización y desarme de los cuerpos militares ilegales organizados bajo el mando de las más altas autoridades del Poder Ejecutivo", continúa el documento.
Sobre este punto el exdiputado y excanciller Víctor Hugo Tinoco, expresó que el Ejército tiene que jugar su papel constitucional para desmantelar las fuerzas paramilitares.
El general en retiro Hugo Torres manifestó que hasta el momento hay indicios sueltos de la participación de “uno o dos militares retirados”, y en algunos casos se ha señalado que podría haber “uno que otro militar activo”, quienes no se sabe si por su voluntad han participado de acciones represivas.
"La denuncia más clara es la que se ha hecho acá respecto al armamento fotografiado en manos de paramilitares como el fusil Dragunov que tiene alcance de 1300 metros... estas armas deberían estar en manos de fuerzas militares y no de irregulares. Esa denuncia tiene un fundamento fuerte porque hay imágenes y el alto mando del Ejército, debería pronunciarse con claridad al respecto", aseguró Torres.
El tercer punto habla sobre la grave situación a la que el presidente Ortega ha llevado al país, con asesinatos, secuestros y desapariciones, mediante listados de gran número de ciudadanos, los que luego aparecen abandonados con graves signos de tortura.
"Se requiere de la solidaridad y el apoyo de los organismos competentes de la comunidad internacional que en iguales circunstancias han respaldado activamente la puesta en vigencia de los derechos humanos y el retorno a condiciones de paz y estabilidad", afirmó Violeta Granera, coordinadora del FAD.
El jurista y también miembro del FAD, José Pallais, la carta constitutiva de las Naciones Unidas y las funciones asignadas por esa carta al consejo de seguridad de este organismo, son claras, pues tienen el mandato de proteger la vida y la seguridad y estabilidad de un pueblo, como el nicaragüense.
"En otras ocasiones esa intervención ha sido positiva en el marco legal del derecho internacional y ha traído resultados favorables al pueblo de Nicaragua. El objetivo es salvar la vida y detener el genocidio. Ya estamos hablando de niveles de asesinato que son un escándalo a nivel mundial", expresó Pallais.