6 de agosto 2021
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El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo intentar controlar, a través de un decreto presidencial, toda clase de premio o reconocimiento otorgado por organismos internacionales o países extranjeros a los ciudadanos nicaragüenses. Una medida en la que el régimen se adjudica más jurisdicción de la que en realidad posee.
En una reforma al decreto presidencial 22-2015 publicada en La Gaceta de este 05 de agosto, dice que ahora los países u organismos internacionales que deseen premiar a una persona nicaragüense, "deberá solicitar previamente el consentimiento del Gobierno de Nicaragua" a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, a fin de que otorgue "el correspondiente beneplácito".
"El Gobierno, Estado extranjero, organismo o institución internacional que deseen otorgar premio, condecoración o reconocimiento a una persona natural o jurídica nicaragüense, deberá solicitar previamente el consentimiento del Gobierno de Nicaragua por conducto del Ministerio de Relaciones Exteriores, a fin de que otorgue en términos de reciprocidad el correspondiente beneplácito", estableció Ortega en el decreto.
Hasta ahora el Poder Ejecutivo no ha explicado las razones del decreto, que en uno de sus párrafos recuerda que el presidente de Nicaragua "podrá otorgar órdenes honoríficas y condecoraciones a ciudadanos nacionales o de otras nacionalidades".
Los más premiados son críticos de Ortega
Entre los nicaragüenses con más premios y otros honores internacionales recibidos desde que Ortega retornó al poder en 2007, están los escritores Sergio Ramírez y Gioconda Belli, así como el fallecido poeta y sacerdote trapense Ernesto Cardenal (1925-2020), todos críticos de Ortega.
Ramírez ha recibido premios otorgados en Argentina, Chile, España, y Francia, entre los que destaca el Cervantes 2017, el más prestigioso para un escritor después del Nobel.
El día que Ramírez recibió el Cervantes, el escritor se presentó con un lazo negro en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares, en señal de luto por las personas muertas en ataques armados contra las manifestaciones antigubernamentales en 2018.
Belli, quien mantiene una crítica constante hacia Ortega en sus redes sociales, ha sido premiada en Alemania, Chile, Colombia, España, México, Países Bajos y Perú, incluyendo el Premio de Novela Mario Vargas Llosa.
Sobre el decreto del régimen, la escritora denunció que Ortega se está atribuyendo "facultades que no posee", puesto que el reconocimiento de los nicaragüenses en el exterior es "por méritos individuales" y "nada de eso les toca aprobar" al régimen.
Con ese absurdo Art 24 que salió hoy, el Estado Nic se atribuye facultades que no posee más que en el imaginario absolutista de la pareja en el poder. Los premios que ganamos los nicas por méritos individuales nos pertenecen a título personal. Nada de eso les toca aprobar. 🙃
— Gioconda Belli (@GiocondaBelliP) August 6, 2021
Cardenal, por su parte, recibió honores en Chile, España, Francia, México, República Dominicana y Uruguay, entre los que destacan el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana 2012 y la orden Legión de Honor en Grado de Oficial, otorgado por el Gobierno francés en 2013.
Uno de los personajes más conocidos de Nicaragua recientemente premiado es otro crítico de Ortega, el periodista Carlos Fernando Chamorro, hermano de la aspirante a la presidencia y presa política Cristiana Chamorro, hijo de la expresidenta Violeta Barrios de Chamorro, a quien le fue otorgado el premio Ortega y Gasset 2021.
Los tres críticos de Ortega que han sido premiados y que continúan vivos (Ramírez, Belli y Chamorro) están residiendo fuera de Nicaragua por razones de seguridad o para evitar ser detenidos en medio de ola de arrestos que han desatado las autoridades contra líderes opositores y profesionales independientes en los últimos dos meses, con miras a las elecciones de noviembre.
Decreto "absurdo" con un fin claro
Para el abogado Gonzalo Carrión, el decreto de Ortega "raya en lo absurdo" porque cada Estado es soberano y no existe manera de que se materialice. Sin embargo, advierte que el régimen se intenta proyectar como un "supremo juez" y busca "borrar la memoria colectiva" que premia a quienes denuncian los atropellos de la pareja en el poder y pretende "imponer la verdad oficial".
"Nada de esto se explica en el ordenamiento jurídico constitucional porque —incluso en el marco del concierto internacional— todo está basado en la racionalidad", comentó Carrión. Pero, según este decreto, el régimen "va a decidir las calidades de una persona y va a ser el supremo juez para decir si es candidata a algo", agregó.
El abogado consideró que "no existe manera" que el régimen evite que un nicaragüense sea reconocido a nivel internacional, pero valoró que el decreto está basado en la lógica de "silenciar" a cualquier persona que denuncie las violaciones a los derechos humanos en el país.
"Quieren tener el control de eso (los premios y reconocimientos) porque eso recuerda el estado de terror y la extraordinaria rebelión de abril (ocurrida en 2018)", comentó Carrión. "Es borrar de raíz la memoria colectiva para preservar la historia oficial".
*Con información de Efe
