La Dichosa y El Matador

La noche del lunes 9 de mayo, uno de los noticieros rojos de la televisión nica y el noticiero de la radio del comandante Daniel Ortega, difundieron una “noticia” en la que se narraba el pleito entre dos hombres que supuestamente se disputaban el “corazón” de una joven habitante del Barrio Monseñor Lezcano.

Envuelta en una toalla e iluminada solo por la lámpara de la cámara del canal de TV, Josseling Barberena saltó a la notoriedad al contarle a los periodistas de esos noticieros que ella se sentía “dichosa” por ser el centro de una disputa resuelta a golpes y patadas.

Un día más tarde, cuando estos mismos medios la habían bautizado como “La Dichosa” —y memes y canciones sobre ella circulaban en las redes sociales—, Josseling Barberena volvió a ser grabada por un canal de TV. Ella explicó que lo ocurrido fue una agresión de entre dos hombres, a quienes identificó por sus alias. Que ella salió asustada de su casa y auxilió al perdedor del pleito. Pidió a sus entrevistadores que ya no le hicieran bullying y contó que el episodio había afectado a sus hijos en la escuela. Es una madre soltera de tres párvulos.

Este episodio provoca varias reflexiones.

La primera es el uso de imágenes de las personas vulnerables sin su autorización. Estos medios lo hacen porque tienen un poder frente al cual la gente pobre se siente apocada. Si Josseling hubiera habitado uno de los residenciales de la zona sur de Managua, ¿usted cree que la habrían puesto en cámara y en la radio de esa manera? Si ella tuviera el poder de demandarlos, ¿cree que la habrían tratado así?

Cuando Josseling pide que ya no le hagan bullying está pidiendo que retiren de esas televisoras y radios, y de las redes sociales, todas las “producciones” que sobre su “dicha” se han elaborado y circulado. O sea, reclama el derecho a su imagen. Un derecho humano. Ya que ella lo reclama, lo menos que uno esperaría es que la Radio Ya y el Canal 10 eliminen todo ese material y se disculpen públicamente con Josseling y sus hijos. ¿Lo harán?

Parece que no. La respuesta de RATENSA, propietaria de Canal 10, fue postear fotos de varias de sus presentadoras junto a Josseling a la entrada de ese medio de comunicación. Y, más tarde, en una secuencia de fotos y vídeos en la que se les hace un “make-over” a su imagen.

Una segunda reflexión es ¿cuál era la noticia? El relato de esos medios se decantó por el viejo cuento del “conflicto pasional”. Si esos periodistas se hubieran tomado la molestia de ser diligentes se habrían dado cuenta que el tema era la violencia, que cada día empeora en la oficialmente idílica Nicaragua. Pero, claro está, ellos no pueden contradecir la versión oficial proclamada en el Angelus de los medios oficiales por doña Rosario Murillo.

Finalmente, ¿por qué tanta alharaca en estos medios y en las redes sociales, con el teléfono supuestamente robado por Ricardo Mayorga y lo “dichosa” que supuestamente estaba Josseling? La respuesta la adelantó el comandante Daniel Ortega en marzo del 2008, cuando criticó a los medios de comunicación que se ceban en la gente vulnerable.

La crítica del comandante Ortega era que los que producen y difunden noticias sobre violencia en los barrios lo hacen porque son clasistas, violadores de derechos humanos, insensibles ante los problemas reales de las comunidades más vulnerables. Tenía razón. Mi pregunta es por qué su Radio Ya y su Canal 8 no atienden su crítica.

Y para darle otra vuelta a la tuerca, ahora sabemos que mientras Mayorga ha pasado de acusado a acusador, Josseling Barberena es expuesta como una madre valiente, optimista y necesitada de ayuda. Recuerden, es mayo, Mes de la Madre.

¡Ah, pero nadie aborda porqué existen las Josseling Barberenas ni las ausencias notables del sistema injusto en que vivimos!