19 de noviembre 2024
Los policías que detuvieron y desterraron de Nicaragua al obispo de la diócesis de Jinotega y presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, Carlos Enrique Herrera, le indicaron que su expulsión del territorio nacional se debía a que con sus homilías “atentaba contra el orden y la seguridad pública”, reveló a CONFIDENCIAL una fuente vinculada a la Iglesia católica del país.
La fuente indicó que la detención del obispo ocurrió en Managua el 12 de noviembre de 2024, cuando circulaba en su vehículo.
Los oficiales que lo detuvieron, “lo llevaron directamente al aeropuerto, le entregaron un pasaporte y un boleto de avión. Le dijeron que el motivo de su expulsión era porque “atentaba contra el orden y la seguridad pública con sus homilías”, expresó la fuente de la Iglesia.
Luego de ese hecho, monseñor Herrera arribó a Ciudad de Guatemala a las 10:50 de la noche del 12 de noviembre de 2024 en un vuelo comercial. Fue recibido en el Aeropuerto Internacional La Aurora por una comitiva de la Orden de Frailes Menores a la que pertenece y que desde entonces lo ha acogido, según el medio Despacho 505.
El "delito" del obispo de Jinotega
El domingo 10 de noviembre de 2024, durante la eucaristía, el obispo Carlos Enrique Herrera criticó el bullicio de una actividad de la Alcaldía, que le impedía dar y escuchar la ceremonia.
“Pidamos al Señor perdón por nuestras faltas y también por aquellos que no respetan el culto, verdad, pidiéndole porque este es un sacrilegio que está cometiendo el alcalde y todas las autoridades municipales, y vayan a decírselo porque saben la hora de la misa”, dijo el obispo Carlos Enrique Herrera.
Previo a ese evento, monseñor Herrera había enviado "varias cartas al alcalde de Jinotega (Leónidas Centeno) para que por favor quitara los parlantes frente a la iglesia", señaló en sus redes sociales monseñor José Antonio Canales, obispo de Danlí, en el departamento de El Paraíso, Honduras.
"Él (Centeno), Rosario Murillo y Daniel Ortega darán cuenta un día ante el tribunal de Dios por la infamia de haberlo desterrado", agregó el obispo hondureño.
Antes del obispo Herrera, la dictadura orteguista ya había encarcelado y desterrado a dos obispos: el obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, y el obispo de Siuna, monseñor Isidoro Mora.
¿Quién es el obispo Carlos Enrique Herrera?
Monseñor Carlos Enrique Herrera, obispo de la diócesis de Jinotega, en el norte de Nicaragua, fue nombrado como el nuevo presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) para el período 2021-2024, durante la Asamblea Anual realizada por los obispos en noviembre de 2021. El vicepresidente confirmado fue el cardenal Leopoldo Brenes.
Para entonces, monseñor Herrera también era el presidente de la pastoral social de la Iglesia católica, Cáritas Nicaragua, cancelada por la dictadura orteguista, obligando a la Iglesia católica a cancelar decenas de proyectos de asistencia social.
Monseñor Carlos Enrique Herrera fue ordenado sacerdote el 10 de enero de 1982 en la Iglesia San José de Matagalpa. Tiene estudios filosóficos, realizados en el Instituto Filosófico Salesiano de Guatemala. Además, cursó una especialización en Pastoral Familiar y un diplomado en Teología Pastoral en Colombia.
Como presidente de Cáritas Nicaragua, monseñor Herrera denunció el bloqueo aduanero que el Gobierno impuso a la pastoral desde 2019, impidiendo la recepción de donaciones del exterior.
En 2020, monseñor Herrera también advirtió el avance de la pandemia de covid-19 en el departamento de Jinotega, incluyendo la confirmación de contagios y fallecidos en las áreas rurales.
Igualmente, previo a las votaciones del 7 de noviembre, calificadas amplíamente como una "farsa electoral" por la falta de garantías mínimas para garantizar un proceso transparente, justo, libre y competitivo, monseñor Herrera fue uno de los obispos que advirtió de que no existían garantías de transparencia votar. Además, insistió en que los ciudadanos deben impulsar el cambio social, a pesar del “temor, desconfianza e inseguridad” que se vive en el país.
En agosto de 2021, en entrevista con CONFIDENCIAL, el obispo Carlos Enrique Herrera también aseguró que no percibía entre su feligresía mucho ánimo por las elecciones generales de noviembre de ese año, en las que finalmente Daniel Ortega se impuso por un cuarto período período presidencial consecutivo, junto a su esposa Rosario Murillo como vicepresidenta, y tras anular la competencia electoral por encarcelar a los líderes opositores.