11 de marzo 2022
AA
Nicaragua registró, en los últimos dos años, un incremento de pacientes crónicos con enfermedades cardíacas y psiquiátricas, reveló una reciente actualización del Mapa de Salud, hecha por el Gobierno.
Según los datos del Ministerio de Salud (Minsa), la población crónica general aumentó desde 2020, pero fue en 2021 cuando se registró un mayor número de pacientes. En 2019, el reporte oficial de estos pacientes era 273 194, pero el año pasado se elevó a 396 148.
Las causas de mayor aumento fueron las cardíacas, al pasar de 24 pacientes por cada 10 000 personas en 2019, a 95 en 2021. Mientras, las personas con problemas psiquiátricos pasaron de 13 a 44 por la misma tasa.
Médicos independientes coincidieron que este incremento podría estar relacionado a la pandemia, y a las preocupaciones detonadas por la crisis sociopolítica que se vive en el país desde 2018.
“El incremento de los problemas psiquiátricos y cardíacos está fuertemente asociado al nivel de estrés de la población. El estrés y el trauma entre los nicaragüenses han aumentado significativamente en los últimos años”, opinó el epidemiólogo Álvaro Ramírez.
Según el Mapa de Salud, hasta 2021 la población con cardiopatías era de 41 726, el 62% más que la reportada en 2019. Mientras, los nicaragüenses con problemas psiquiátricos eran unos 18 258, el 52% más que los que habían antes de la pandemia. Asimismo, los datos muestran un aumento del 43% de pacientes con asma.
“Llama la atención que (los pacientes con) asma bronquial, problemas cardíacos o con una enfermedad psiquiátrica, han incrementado hasta tres o cuatro veces su riesgo de fallecer. Antes no llegaban ni a un caso por cada 100”, destalló el epidemiólogo Leonel Argüello.
“Este incremento puede reflejar el impacto que ha tenido la epidemia de la covid-19 en las enfermedades crónicas”, añadió.
Diabéticos e hipertensos son la mayor población crónica del país
A pesar del incremento de estas condiciones, los pacientes hipertensos y diabéticos —que más predominan en el país— son los más vulnerables ante la covid-19. Según el Mapa de Salud, hasta 2021 había un total de 372 056, el 66% de estos padecen hipertensión arterial.
Estas enfermedades también registran un aumento. Antes de la pandemia por cada 10 000 personas había 262 pacientes hipertensos, pero después el número se elevó a 583 en 2020 y a 550 en 2021.
En el caso de la diabetes los casos pasaron de 130 por la misma tasa a 292 en 2020 y a 285 en 2021. En esos dos años, hubo un incremento en las muertes por esta causa atribuible a la covid-19.
Además, estas son dos de las nueve “comorbilidades” que elevan el riesgo de enfermar de forma grave por covid-19 y que el Minsa admite en sus informes semanales.
Menos hospitalizaciones, pero más muertes
En el caso de las hospitalizaciones, el Minsa asegura que durante la pandemia hubo menos pacientes ingresados. En 2018 hubo 424 301 personas internadas por diferentes causas, en 2019 aumentó a 485 118. Sin embargo, en el primer año de la pandemia solo hubo 377 499 ingresos hospitalarios. Mientras, en 2021, el reporte se elevó a 418 785.
Este comportamiento no coincide con el reporte de médicos públicos y privados que informaron un exceso de pacientes durante los picos de la pandemia, ocurridos en mayo y julio de 2020, y en agosto y octubre de 2021.
Según conoció CONFIDENCIAL, los principales hospitales del país sobrepasaron su capacidad hospitalaria. En los dos brotes, el Hospital Alemán Nicaragüense (HAN) tuvo que ampliar el número de camas. Fuentes sanitarias informaron que pasó de 250 camas disponibles a 500 durante la segunda ola.
Asimismo, en el Hospital San Juan de Dios, ubicado en Estelí, tuvieron que llevar camas de otro hospital para recibir más pacientes.
Mientras, el Minsa asegura que hubo menos pacientes ingresados, los datos señalaron una mayor mortalidad. En el caso de las neumonías, indican que en 2019 se registraron 32 632 hospitalizados y hubo 539 muertos por esta causa.
Sin embargo, en 2020 la cifra de ingresos fue de 22 130 y los fallecimientos fueron de 2844. Lo mismo ocurrió en 2021, que reportaron 22 205 ingresos, pero hubo 2 330 muertos, cuatro veces más decesos que en 2019.
Los datos generales indicaron que el riesgo de fallecer se incrementó durante la pandemia. En 2019 hubo un total de 25 338 fallecidos, pero al año siguiente se elevó a 33 650 y en 2021 se reportaron 33 582.
