15 de noviembre 2022
El portavoz de Exteriores de la Unión Europea (UE), Peter Stano, señaló que las recientes votaciones municipales en Nicaragua “no pueden considerarse democráticas ni legítimas”.
En declaraciones al medio Despacho 505, el funcionario europeo destacó que los comicios nicaragüenses “han vuelto a celebrarse sin una competencia electoral creíble”.
Con las votaciones municipales, celebradas el pasado 6 de noviembre, el oficialista Frente Sandinista se adjudicó el control del 100% de las 153 alcaldías de Nicaragua.
Stano comentó que el resultado de las votaciones “no hará más que afianzar la crisis sociopolítica de Nicaragua y aumentar el descontento palpable de su pueblo”.
Los datos oficiales del Consejo Supremo Electoral (CSE) –que carecen de credibilidad y no son auditables– muestran que hubo una participación de 57.5% de la población. Sin embargo, el observatorio ciudadano Urnas Abiertas registró una abstención del 82.7%. Ese nivel de abstención supera al observado en la “farsa electoral” de 2021, que fue del 81.5%.
“Compromiso con el pueblo”
“La Unión Europea reafirma su continuo compromiso con el pueblo nicaragüense, que es el legítimo propietario de la soberanía del país, y con la defensa de la democracia, el Estado de derecho y los derechos humanos”, dijo el alto funcionario.
“La actual crisis política de Nicaragua debe resolverse pacíficamente mediante un auténtico diálogo entre el Gobierno y la oposición, seguido de unas elecciones creíbles”, destacó.
Las relaciones entre el bloqueo europeo y el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo se crisparon en los últimos meses, luego que la dictadura expulsó —a finales de septiembre pasado— a la jefa de la delegación europea en Nicaragua, Bettina Muscheidt, y días después anunció la ruptura de relaciones diplomáticas con Holanda. En respuesta, la UE declaró el 10 de octubre “non grata” a la jefe de la misión de Nicaragua en Bruselas, Zoila Yanira Müller Goff.
Además, a mediados de octubre pasado, el Consejo Europeo —institución en la que están representados los Gobiernos de los 27 países miembros— extendió por tercer año consecutivo las sanciones impuestas contra altos funcionarios y personalidades vinculadas al régimen.
Desde 2019, el bloque europeo ha sancionado a 21 altos funcionarios del régimen, entre ellos la vicepresidenta y primera dama Murillo y sus hijos Juan Carlos, Camila y Laureano Ortega Murillo.