5 de mayo 2025
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El nicaragüense Rodolfo Joel López Jarquín fue enviado, a principios de abril de 2025, a la base naval de Guantánamo, en Cuba, para su deportación a Nicaragua, pese a que entró legalmente a Estados Unidos bajo el programa parole humanitario, en agosto de 2024, según una declaración jurada del ciudadano.
López Jarquín y otro nicaragüense, Johon Elias Suazo-Muller, encabezan una demanda, presentada ante un juez federal en Washington, en la que exigen que intervenga en nombre de todos los inmigrantes que sean enviados a Guantánamo.
“Llegué a Estados Unidos desde Nicaragua el 7 de agosto de 2024 con permiso humanitario para nicaragüenses. Llegué a través del programa que el Gobierno anterior (de Joe Biden) creó para ciertos países”, señaló el nicaragüense en la declaración enviada al juez y a la que tuvo acceso CONFIDENCIAL.
“Volé a Miami —continuó— y obtuve permiso condicional por dos años. Sin embargo, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) me detuvo antes de que terminara mi permiso”.
“Actualmente me encuentro detenido en Guantánamo. No estoy seguro del nombre de la zona en la que me encuentro, pero me han dicho que es el ‘centro de operaciones para migrantes’. Llegué a Guantánamo el 5 de abril de 2025”, detalla López Jarquín.
Hasta inicios de abril de 2025, unos 400 migrantes deportados de Estados Unidos, en su mayoría ciudadanos de Venezuela y Nicaragua, han sido enviados a Guantánamo, según una publicación de The New York Times.
El primer vuelo con deportados nicaragüenses, procedentes de Guantánamo, llegó a Managua el 3 de abril de 2025. El dictador nicaragüense Daniel Ortega aseguró, sin dar detalles, que en la última semana de ese mes llegó otro vuelo con deportados desde la base de Guantánamo.
El vuelo del 3 de abril partió de Alexandria, en Luisiana, con 100 deportados nicaragüenses, hizo una escala en Guantánamo donde recogió a otros 44 deportados, por lo que en Managua aterrizaron 144 ciudadanos, de acuerdo con información del diario The New York Times y un reporte de Thomas Cartwright, que rastrea los vuelos de deportación estadounidenses desde 2020.
Llevado a Guantánamo bajo mentiras
López Jarquín relató que, previo a Guantánamo, estuvo recluido en un centro de detención del ICE en Pina Prairie, Luisiana, desde el 10 de febrero de 2025 hasta inicios de abril.
“El 4 de abril, me trasladaron a Alexandria y me dijeron que estaba a punto de ser trasladado a Nicaragua. Pero era mentira; me llevaron a Guantánamo al día siguiente. Fue realmente impactante. No sabíamos dónde estábamos hasta que llegó el avión y vimos a los militares. La gente estaba horrorizada. Pensábamos que íbamos a casa”, dijo el nicaragüense.
La declaración de López Jarquín fue tomada y certificada por Marisol Domínguez Ruiz, abogada del Proyecto Nacional de Prisiones de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), organización que dirige la demanda legal.
El migrante nicaragüense aseguró que “no he sido condenado por ningún delito en Estados Unidos ni en Nicaragua. A principios de febrero (de 2025), la Policía de Luisiana me detuvo tras una queja por ruido, pero, que yo sepa, no me acusaron de ningún delito”.
“La Policía dijo que podían retenerme a la espera de la llegada de ICE, y luego ICE vino y me detuvo. Nunca he formado parte de ninguna pandilla. No tengo tatuajes”, añadió.
“Cuando llegué a Guantánamo, no me informaron que tenía derecho a hablar con un abogado. Solo nos preguntaron sobre cualquier enfermedad y luego nos asignaron a habitaciones con seis camas”, subrayó.
