30 de noviembre 2022
El presidente de Costa Rica Rodrigo Chaves anunció este miércoles 30 de noviembre cambios importantes en la política migratoria y de refugio que afectarán a nicaragüenses, quienes representan la gran mayoría de solicitudes de refugio en ese país. Entre los cambios están:
- El permiso laboral para solicitantes de refugio ya no se otorgará de forma expedita, sino tras completar un procedimiento (que aún no se anuncia) ante las autoridades migratorias.
- Toda nueva solicitud de refugio debe ser presentada de forma presencial dentro de un mes natural a partir del día del ingreso de la persona a Costa Rica, sin necesidad de solicitar cita, pero sí en persona.
- A quien ya le fue otorgado el permiso laboral como solicitante de refugio se le renovará solo si la persona está inscrita ante la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS).
- Los solicitantes de refugio no podrán salir de Costa Rica. Anteriormente, el impedimento era únicamente para viajar al país de origen, ahora tampoco podrán visitar otros países.
- Se renovará una categoría especial para que puedan regularizar su situación migratoria personas de Nicaragua, Cuba y Venezuela.
#CostaRica anuncia cambios en su política migratoria y de refugio. Los solicitantes de refugio no tendrán acceso a un permiso laboral de forma expedita ni podrán viajar fuera del país. Por otro lado, se renovó una categoría especial para venezolanos, cubanos y nicaragüenses. 🧵
— Cindy Regidor (@cindyregidor) November 30, 2022
Este 30 de noviembre se dio la firma de los dos decretos que contienen estos cambios: uno que implica una reforma al Reglamento de Refugio (que entra en vigencia a partir de su publicación) y otro sobre la Categoría Especial Temporal para Personas Nacionales de Cuba, Nicaragua y Venezuela (vigente a partir de marzo de 2023).
El presidente Chaves ya había advertido el pasado 16 de noviembre que tomaría medidas "para evitar que nuestro régimen de refugiados sea aprovechado de manera incorrecta por personas que lo que quieren es emigrar a Costa Rica, quedarse aquí para trabajar”, ante lo que él describió como falta de apoyo financiero de la comunidad internacional para atender a las decenas de miles de solicitantes de refugio que se encuentran en el país.
Las declaraciones del mandatario costarricense fueron cuestionadas por organizaciones defensoras de los derechos de migrantes, personas refugiadas y solicitantes de refugio en el país, mientras que Naciones Unidas (ONU) pidió información a Costa Rica sobre los cambios en las políticas migratorias.
La ONU también reconoció que sus agencias han recibido “insuficiente apoyo de la comunidad internacional” para atender los “movimientos mixtos de personas”, aunque recalcó que el monto ejecutado para apoyar a las poblaciones migrantes y solicitantes de refugio asciende a los 94 millones de dólares.
Cuestionan impedimento de viaje para solicitantes de refugio
El nuevo impedimento que tendrán los solicitantes de refugio para salir de Costa Rica no solo hacia su país de origen, sino a cualquier destino, afectará a personas que "tienen una condición de buen derecho para ser refugiados", explicó a CONFIDENCIAL el exsubdirector de la Dirección de Migración y Extranjería de Costa Rica, Daguer Hernández.
En su experiencia al frente de esa institución entre 2018 y mayo de 2022, "las personas a las que podría reconocerse la condición de refugio son las que piden autorización para salir del país en virtud de que tienen familiares fuera del país o salen a conferencias para expresar las condiciones de persecución en su país de origen".
Hernández agregó que "quienes realmente están siendo perseguidos son las personas que van a ser afectadas con la restricción de salida del país. A los migrantes laborales que abusaron del sistema de refugio para (obtener) un permiso laboral no les afectan las restricciones de salida del país, (pues) ellos están en Costa Rica trabajando, no les interesa salir del país".
El especialista también se refirió al cambio que retrasará el otorgamiento del permiso de trabajo para quienes solicitan refugio.
Explicó que "ya el reglamento de Refugio, en su artículo 54, establece que (el permiso laboral) tiene que darse tres meses después de que a la persona solicitante no se le resuelve su caso". Esto es "en cumplimiento de la normativa internacional y las recomendaciones de ACNUR", y dijo que, al ser una norma reglamentaria, puede cambiarse y modificarse por el Ejecutivo, tal y como lo hizo Chaves.
Sin embargo, la lógica de entregar el permiso de trabajo a los tres meses de realizada la solicitud, obedece a la necesidad de darle a la persona la posibilidad económica de subsistir. Con la entrada en vigencia de la nueva política, los solicitantes deberán "cumplir con el procedimiento interno que establezca la institución y que se comunicará oportunamente" para obtener ese permiso laboral.
Categoría especial para venezolanos cubanos y nicaragüenses
Tanto en el comunicado como en conferencia, el Gobierno del presidente Chaves anunció la creación de "la Categoría Especial Temporal para Personas Nacionales de Cuba, Nicaragua y Venezuela, la cual entraría a regir el 1 de marzo de 2023". Las personas de estas nacionalidades conforman el 96% de los solicitantes de refugio, según dijo Chaves.
Con dicha categoría, esas personas podrán trabajar por dos años, siempre y cuando renuncien a la solicitud de refugio, se inscriban en la CCSS y demuestren que no tienen antecedentes penales en su país. Además, siempre y cuando estas personas hayan realizado su solicitud de refugio entre el primero de enero de 2010 y el 30 de septiembre de 2022, y no hayan estado en su país de origen durante ese periodo.
Una categoría muy parecida ya había sido habilitada por la Administración anterior del presidente Carlos Alvarado y era llamada "de protección complementaria". A través de la misma, casi mil nicaragüenses pudieron regular su situación migratoria.
La renovación de este mecanismo es bien visto por Hernández, pues se trata de una vía para los migrantes de esas nacionalidades que quieren regularizar su situación migratoria en Costa Rica. "Agregaría, además de las personas solicitantes de Refugio, a otros solicitantes de otras categorías migratorias que tengan más de dos años de presentación (de trámite) en Migración y Extranjería y que no se lo hayan resuelto. Eso colaboraría también (a destrabar) las categorías migratorias ordinarias", explicó.
Rodrigo Chaves: "Costa Rica mantendrá los brazos abiertos a los refugiados legítimos"
Chaves expresó en conferencia de prensa semanal, al justificar los cambios que implicarán trabas para los solicitantes de refugio, que “Costa Rica mantendrá los brazos abiertos a los refugiados legítimos, pero, hay veces que la gente abusa de la generosidad, y no los culpo. Teníamos un portillo abierto en que migrantes económicos se hacían pasar por ese tipo de personas que merecen refugio para poder trabajar en el país".
Según el comunicado oficial "a la fecha, la Dirección General de Migración y Extranjería, ha recibido 222 056 solicitudes de refugio desde 2018, de ellas 172 689 se encuentran aún pendientes de resolver". El 90% de las solicitudes corresponden a nicaragüenses que se han visto obligados a salir por la crisis sociopolítica que estalló en Nicaragua en 2018 debido a la brutal represión ordenada por el régimen Ortega Murillo. Las autoridades buscaban sofocar las masivas protestas ciudadanas que demandaban la salida del poder de Daniel Ortega y el restablecimiento de la democracia.
El comunicado de Migración costarricense también refiere que "la institución ha detectado que entre un 80% a un 90% de las personas que solicitan refugio no califican dentro de la definición de esta protección internacional, incluyendo migrantes económicos o que llevan años viviendo en el país y nunca se han regularizado". En Nicaragua, la crisis sociopolítica que continúa irresuelta y la agudización de la represión han provocado el deterioro de la situación económica, por lo que decenas de miles de nicaragüenses han sido forzados a emigrar principalmente hacia Estados Unidos y Costa Rica.
En los últimos dos años se ha producido un éxodo sin precedentes, que se refleja en los 147 270 "encuentros" o detenciones de migrantes nicaragüenses en las fronteras estadounidenses en los primeros diez meses del presente año, según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés). En Costa Rica, entre enero y octubre de 2022, se contabilizan 69 891 solicitudes de refugio de nicaragüenses.