
16 de enero 2023
PUBLICIDAD 1M
PUBLICIDAD 4D
PUBLICIDAD 5D
Policía orteguista mantiene asedio e intimidación en contra de templos y sus sacerdotes en varios puntos de Nicaragua
Régimen orteguista mantiene arremetida contra la Iglesia católica y prohíbe procesiones en varios departamentos de Nicaragua
El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo ha prohibido al menos seis procesiones durante las primeras dos semanas de 2023, además de enviar a juicio al obispo Rolando Álvarez -con casa por cárcel desde hace tres meses- y ha mantenido la intimidación policial contra sacerdotes en varias ciudades de Nicaragua. Dichas acciones, según defensores de derechos humanos, proyectan un año “igual o peor que 2022”, cuando la dictadura intensificó la persecución contra la Iglesia católica y encarceló a once religiosos.
La investigadora y abogada, Martha Patricia Molina, considera que el año 2023 “inició extremadamente agresivo. Todos estos elementos -en relación a las prohibiciones de procesiones y procesos judiciales- proyectan que va a ser un año nefasto para la Iglesia católica…”, sostuvo.
En cuatro meses de 2022 el régimen orteguista prohibió seis grandes procesiones en el país. Sin embargo, actualmente, dichas restricciones se han ampliado también a celebraciones religiosas más locales, contabilizando seis imágenes de santos que debieron quedarse en sus templos durante la primera quincena de enero.
El régimen orteguista ha prohibido las siguientes procesiones en lo que va de 2023:
Desde el segundo semestre de 2022, la Policía del régimen argumentando “motivos de seguridad interna” ha restringido las procesiones de santos patronos en departamentos icónicos del país, como San Jerónimo y San Miguel en Masaya o la procesión de la Virgen de la Merced, patrona de la Diócesis de Matagalpa. Los sacerdotes no han tenido más opción que celebrar a los santos dentro de los templos, y en algunos casos, sacarlos a los atrios de las respectivas parroquias.
Ante la represión imparable del Gobierno contra la Iglesia, los sacerdotes han callado sobre las visitas policiales, informándoles que no pueden sacar a los santos en procesión. Ellos se limitan a anunciar en los programas de fiestas patronales que las imágenes no saldrán, pero no explican las razones por prudencia, señala Molina. La investigadora sostiene que muchas parroquias del interior del país han vivido esta situación de intimidación, pero callan para evitar más represalias.
Entre las procesiones prohibidas recientemente, el caso de mayor ensañamiento ocurrió en Masaya. La imagen de San Sebastián, quedó en la entrada de la parroquia Santa María Magdalena, después que el comisionado general Juan Valle Valle, jefe policial de ese departamento, le cerró las puertas a los devotos —apoyado en la presencia de decenas de antimotines— cuando intentaban sacar el santo a la calle, el pasado 10 de enero.
Todos los accesos al templo fueron cercados por conos, policías de tránsito y antimotines. El despliegue policial fue brutal en una ciudad que vive bajo vigilancia desde la Rebelión de Abril de 2018. Por otro lado, las celebraciones en honor a San Sebastián, patrono de Diriamba, Carazo, se han realizado sin ningún tipo de restricción.
La persecución de Ortega contra la Iglesia provocó el exilio de más de media docena de religiosos en 2022, que escaparon de ser secuestrados por la dictadura y engrosar la lista de once sacerdotes, seminaristas y un diácono encarcelados en diferentes instancias del Sistema Penitenciario Nacional, y en arresto domiciliario, como es el caso del obispo Álvarez.
Molina señala que otros sacerdotes permanecen asediados día y noche por la Policía, pero sus casos no los hacen público por prudencia. No descarta más encarcelamientos y exilio de religiosos.
Y pese a que el régimen oficializó el inicio del juicio contra el primer obispo encarcelado en la historia del país, monseñor Rolando Álvarez, el 10 de enero, y mantuvo la orden de capturar al sacerdote exiliado, Uriel Vallejos, ni la Conferencia Episcopal de Nicaragua, el cardenal Leopoldo Brenes o el Vaticano se han pronunciado abiertamente sobre el caso.
Ese silencio ha sido duramente cuestionado por los mismos religiosos, feligreses y defensores de derechos humanos que no entienden la actitud pasiva ante una de las peores embestidas del régimen contra la Iglesia. Un estudio realizado por Molina reveló 396 ataques contra la institución religiosa desde 2018 a octubre de 2022.
Por su parte, el defensor de derechos humanos, Gonzalo Carrión, explicó que el régimen continúa implementando un Estado de terror, que también se evidencia en la judicialización del obispo Álvarez y el resto de sacerdotes, además de la intensificación de "esa guerra" contra el pueblo y la Iglesia. El régimen no permite ningún tipo de aglomeración y particularmente de la Iglesia católica, violando el derecho a la libertad religiosa de los nicaragüenses.
Archivado como:
PUBLICIDAD 3M
Confidencial es un diario digital nicaragüense, de formato multimedia, fundado por Carlos F. Chamorro en junio de 1996. Inició como un semanario impreso y hoy es un medio de referencia regional con información, análisis, entrevistas, perfiles, reportajes e investigaciones sobre Nicaragua, informando desde el exilio por la persecución política de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
PUBLICIDAD 3D