26 de noviembre 2018
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Con la conversación que tuvo Jesús, cuando fue llevado ante Pilato, los obispos nicaragüenses ilustraron durante su homilía de este domingo, cómo los poderosos que usan la violencia, la prepotencia y la fuerza, son frágiles y vencibles.
“Jesús le dice a Pilato 'Yo soy de un estilo diferente al tuyo. Tu palacio está rodeado de soldados. Tu poder se fundamenta en la violencia, en la crueldad y la guerra. Así son los reinos de este mundo (…) se alimentan de la violencia y producen la muerte. Mi mundo es el del amor y del servicio que produce la vida'”, comentó monseñor Silvio Báez, obispo auxiliar de Managua, durante su sermón.
Monseñor Báez también recordó parte de la homilía del papa Francisco, en la cual afirma que “los reinos basados en el poder de las armas y la prevaricación son frágiles y que tarde o temprano se derrumban”.
En Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, agregó en su homilía que “los reinados de este mundo que se centran en la soberbia, prepotencia, en círculos de poder donde se busca el mejor postor, los reinados de este mundo normalmente ponen su confianza en el hombre en la fuerza y poder humano".
La Iglesia católica y en particular varios de sus sacerdotes y obispos en Managua, Masaya, León, Matagalpa y Estelí han enfrentado una campaña de desprestigio, dirigida por el Gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo, incómodos con su papel de mediación en el Diálogo Nacional y sus llamados al cese de la represión oficial y de la masacre de los nicaragüenses.
La represión del régimen ha dejado al menos 325 muertos confirmados, más de 3000 heridos, decenas de desaparecidos y más de 600 presos políticos, entre los cuales hay 46 mujeres, 28 menores de edad y tres mujeres transexuales. La Unidad Nacional Azul y Blanco junto a los movimientos feministas y la Red de Mujeres contra la Violencia intentaron una manifestación para exigir la libertad de los presos políticos, para este domingo, que fue prohibida por la Policía Nacional, develando el estado policial impuesto por el régimen.
Brenes: "Hay que seguir insistiendo en marcha pacífica"
Ante la renuencia del Gobierno de permitir manifestaciones pacíficas en el país, el cardenal Leopoldo Brenes dijo que se debe continuar insistiendo para marchar y para tener en un futuro “una cultura cívica y una cultura de poca confrontación”.
“Siempre las gotitas de agua no rompen la piedra por la fuerza. Habrá que seguir insistiendo en una marcha pacífica y ojalá que en un tiempo no muy lejano podamos tener no una, sino varias marchas. Desgraciadamente, los nicaragüenses somos fosforito y con nada nos encendemos”, dijo el cardenal después de la homilía, en la cual se concluyó el Año Litúrgico y se realizó una procesión en honor a Cristo Rey.
Asimismo, lamentó el actuar del oficial de la Policía que en días pasados apuntó con su revolver a una estudiante del Colegio República de Argentina, cuando ella le lanzó una piedra al ver que él la estaba grabando.
“Es muy triste que un agente la haya amenazado. Yo quisiera que me hicieran una propaganda para que los comercios no vendan juguetes que simulen un arma. (..) La policía dentro de sus normas y sus reglamentos tiene una capacidad para poder hacer desistir de algunos actos. Tiene esa capacidad de poder dialogar, de poder convencer.” dijo monseñor Brenes.
También, afirmó que aunque el Gobierno no ha respondido a la propuesta que los obispos de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) le hicieron en la reunión que sostuvieron en junio, ellos continúan anuentes al diálogo.
“Nosotros siempre estamos dispuestos (a dialogar). No hemos visto el diálogo como una imposición nuestra sino que es un servicio que se le pidió al señor cardenal en los años ochenta y los noventa. Somos servidores, no vamos ambicionando ningún cargo público. No queremos tomar un cargo político”, concluyó.
